Nueva educación pública: evidencia para los desafíos de futuro

Capítulo 14: El Lugar de la Educación Parvularia en la Nueva Educación Pública 279 Nivel Macro: el rol de las instituciones que impulsan la política de NEP En este nivel, el Ministerio de Educaci n, la Subsecretaría de Educaci n Parvularia y la Direcci n de Educaci n Pública (DEP), han jugado un rol clave en diseñar e impulsar la reforma de NEP. La reflexión a este nivel, es responder a la pregunta que da título a este capítulo: ¿Qué lugar ocupa la educaci n parvularia en la NEP? El año 2023 la DEP publicó un documento titulado “Experiencias innovadoras de apoyo técnico-pedag gico en educaci n inicial en el nuevo sistema de educaci n pública”. En las palabras iniciales del Director de la DEP, se enuncia el lugar que la política está viendo para el nivel de educaci n parvularia en la NEP: “Esta trayectoria educativa comienza en educación inicial, buscando de manera permanente entregar una educaci n pertinente y contextualizada, que dé respuesta al periodo más significativo en la formación de la persona. Así, los primeros años de vida constituyen las bases formativas del ser humano, las que se desplegarán, consolidarán y perfeccionarán en las siguientes etapas. (DEP, 2023, p.6).” Como revisamos en las reflexiones anteriores, los casos analizados dan cuenta que no se ha alcanzado el acoplamiento entre la práctica en el espacio educativo y el propósitomismo de la política pública, debido a la ausencia del nivel intermedio acompañando o respondiendo a los requerimientos de las unidades educativas. Más allá de un cambio “topológico” en términos administrativos de los jardines VTF, el lugar de la educación parvularia en la nueva infraestructura de la NEP está invisibilizado por el nivel intermedio, y no ha encontrado todavía su lugar en articulación con otros niveles educativos. En un sistema educativo que se guía por lógicas escolarizantes (Pardo et al., 2021; Pardo y Opazo, 2019; Poblete Núñez y Falabella, 2020), el mensaje sobre el propósitomoral y social del nivel, tan claro para sus directoras, así como en la narrativa de la política pública, llega a oídos que no escuchan o escuchan en otro idioma en el nivel intermedio. ¿Es posible que el eslabón inicial en el proceso educativo de niños y niñas sea, estructuralmente, el eslab n perdido en la Nueva Educaci n Pública? Si bien, ya resulta un avance en el reconocimiento del nivel de educación parvularia el haber sido incluido dentro de la NEP como parte de la totalidad del sistema educativo, para poder progresar en este reconocimiento, se requiere trabajar con los SLEP para que sus distintas unidades tengan una presencia presente apoyando a las unidades educativas, así como también, cuenten con un acompañamiento técnico pedag gico especializado en el nivel. Se requiere de profesionales del SLEP que puedan escuchar en el idioma y al nivel profesional en que el personal de los jardines infantiles les habla. Uno de los aspectos que explican la invisibilidad del nivel de educación parvularia en los SLEP, es el desfinanciamiento crónico de los jardines VTF. El nivel macro tiene que hacerse cargo de este tema heredado del sistema municipal, si queremos que el nivel de educación parvularia realmente tenga el lugar que le corresponde en la NEP, y desde ahí alcanzar el propósito que se ha planteado como reforma. Por último, el nivel macro tiene que entregar mayor coherencia al discurso de fortalecimiento de la educación pública, con la educación inicial como soporte fundamental del sistema y el punto de inicio de la trayectoria de nuestros niños y niñas. Por ejemplo, un ámbito donde este nivel puede avanzar en darle más visibilidad al nivel de educaci n parvularia, es en las evaluaciones anuales de la NEP que encarga al Consejo de Evaluación del Sistema de Educaci n Pública. La reforma de la NEP es una oportunidad histórica de dar un salto cualitativo en la educación pública del país. Los desafíos acá planteados nos permiten visualizar oportunidades de mejora de la política, que no han sido reconocidas previamente debido a la escasa evidencia sobre el impacto de la incorporación de los jardines infantiles VTF a los SLEP y a la ausencia de mecanismos que permitan alertar consecuencias como las que nos plantean estas directoras. De esta manera, continuar fortaleciendo el acompañamiento a los jardines públicos y su articulación con los otros niveles educativos se vuelve una oportunidad para abordar la fragmentación institucional del nivel de educación parvularia, que conlleva, entre otras consecuencias, inequidad en las oportunidades de aprendizaje de los niños y niñas.