Nueva educación pública: evidencia para los desafíos de futuro
de la implementación de la reforma en algunos SLEP, resumiendo las realidades de los actores clave (directores de escuelas, docentes) en términos de su participación en la reforma y dando voz a los actores involucrados en la integración de la educación infantil y la educación secundaria técnico-profesional en la reforma. Esta introducci n no pretende resumir todos los resultados de los estudios ni los comentarios y recomendaciones de los autores. Basta con decir que existe un consenso general en que el éxito de la reforma de la NEP, en términos de mejora de la gestión y los resultados educativos en las escuelas públicas chilenas, no está garantizado con el cambio estructural de la desmunicipalización y la transferencia de las responsabilidades administrativas y pedagógicas a los nuevos Servicios Locales de Educación. Varios autores subrayan que existe el peligro de que los participantes a nivel de los SLEP reproduzcan las prácticas yperspectivas tradicionalese ineficacesdemuchos administradoresmunicipales. Cabe recordar que, en un principio, los artífices de la NEP previeron un proceso gradual de 10 años para completar la desmunicipalizaci n de 345 administradores y la creaci n de los 70 SLEP. Sin embargo, en la actualidad, debido a los retrasos atribuidos a la pandemia de COVID-19 y a los cambios políticos a nivel nacional, estos plazos se han extendido. Muchos de los retos de implementación identificados en los estudios que se recogen en este libro reflejan las experiencias de los primeros años de los SLEP existentes. Los autores coinciden en que la NEP sigue abriendo una importante oportunidad para avanzar en la mejora y la supervivencia de un sistema de educación pública sólido y equitativo en Chile. Al mismo tiempo, creo que la lista y el conjunto de retos para la mejora que se presentan no se limitan a la NEP y los SLEP. La NEP ha creado -y sigue creando- un nuevo contexto intermedio para la educación pública. Sin embargo, los desafíos de contar con recursos fiscales, materiales y humanos adecuados; la alineación y coordinación entre los niveles del sistema; la capacidad y capacitación de los mandos intermedios y el liderazgo a nivel escolar para ejecutar nuevas funciones centradas en la mejora pedagógica; la participación y colaboración profesional genuina entre las escuelas y con las comunidades; y la incorporación del uso de datos en el trabajo de todos, entre otros aspectos, son desafíos que se pueden encontrar en muchos sistemas escolares a nivel intermedio y de base escolar. Es probable que los actores municipales que aún no se han transferido a los SLEP mencionen desafíos similares. La pregunta es cómo mejorar el sistema chileno en sus múltiples contextos públicos -e incluso privados-, tanto ahora como en el futuro. Esto requiere una inversión a largo plazo en el desarrollo de la capacidad humana con recursos adecuados y la persistencia de un sistema orientado al aprendizaje colaborativo sobre los obstáculos y las soluciones. Stephen Anderson. Profesor emérito. Instituto de Estudios Educativos de Ontario. Universidad de Toronto, Canadá Prólogo N° 2
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=