Guía práctica para investigar con enfoque de género

• 16 Presentación sus experiencias y toda otra identidad, expresión u orientación que quede fuera del binarismo de gé- nero. Así como también, a otros grupos invisibili- zados en la creación de conocimiento, como son las personas mayores, infancias, personas en situación de discapacidad, personas pertenecientes a pue- blos/naciones indígenas, entre otras. Esta exclusión histórica ha generado sesgos en la producción de conocimiento, al no considerar la diversidad de observaciones y experiencias que moldean las diferentes realidades. Generar conoci- miento con enfoque de género no solo permite vali- dar experiencias, sujetos, variables y categorías que históricamente han sido excluidas, sino que tam- bién amplía el alcance de la evidencia científica, beneficiando a sectores más diversos de la socie- dad. En definitiva, lo que está en juego es la calidad, fiabilidad y validez del conocimiento producido y cómo este contribuye a pensar en sociedades más igualitarias. Investigar integrando el enfoque de género impli- ca considerar de forma transversal el análisis de las categorías sexo y/o género en todas las fases o contenido del proceso de investigación. Esto signi- fica tener en cuenta, cuando es pertinente, tanto las diferencias biológicas entre los sexos (macho/hem- bra), como las construcciones sociales y culturales que moldean las relaciones, roles y expectativas asociadas a los géneros (femenino/masculino), así como también, las formas en que estas se expresan (hombre/mujer/no binario/otros). Del mismo modo, es fundamental preguntarse so- bre quiénes se benefician con la investigación, quié- nes quedan fuera del análisis y qué sesgos puedo estar reproduciendo. Más aún, los temas de investi- gación en ciencia, tecnología, ingeniería y matemá- ticas (STEM por sus siglas en inglés) suelen parecer neutrales en cuanto al género. Sin embargo, es ne- cesario preguntarse sobre quién decide y toma de- cisiones respecto a la agenda de investigación; qué intereses modelan y dirigen la investigación o in- novación; quiénes serán los usuarios o usuarias de esta nueva tecnología, invento, software; quiénes se beneficiarán de la investigación o innovación; y de qué manera se beneficiarán. La integración del enfoque de género puede ser in- corporado en la definición de prioridades, concep- tos, preguntas, supuestos e hipótesis en algunos casos; la selección de técnicas de recopilación y roducción dedatos y el análisis (incluyendo su des- agregación por sexo y/o género); así como la evalua- ción, presentación y transferencia de resultados. Si bien esta integración es relevante en diversos campos disciplinarios, su aplicación concreta de- penderá del objeto de estudio. En algunas investi- gaciones bastará con una desagregación por sexo, como en estudios preclínicos o médicos, mientras que en otras se requerirá un análisis de género más profundo, por ejemplo, en investigaciones orienta- das a prevenir la violencia de género. En ciertos ca- sos, será necesario considerar la interacción entre sexo y género, como en estudios sobre nutrición o salud, donde intervienen factores biológicos, cultu- rales y sociales. Esta Guía práctica para investigar con Enfoque de Género es una invitación a replantearnos las pre- guntas y los problemas de investigación en diver- sas disciplinas, a repensar teorías y conceptos, a reevaluar los estándares y modelos de referencia y a convocar a una investigación participativa. Dra. María José Rodríguez Dra. Verónica Aranda Friz

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