Discapacidad y luchas politicas. Narrativas de activistas en Chile

141 Discapacidad y Luchas Políticas universo nada es igual. Aunque muchos piensen que sus vidas son insignificantes, que vivieron en función de trabajar y dormir, es tu historia y merece ser contada. Todo es diversidad infinita, pero tenemos algo que nos permite asumirnos en la igualdad: es la necesidad de respeto y de digni- dad, eso nos encuentra como seres humanos o seres sintientes si pensamos en más amplio. Por esta razón, no hay que incluirnos, nosotros ya estamos aquí, lo que tenemos que hacer, es convivir. Para una convivencia, debes poder aceptarme como tal y entregar- me todas las oportunidades que necesito para así, construir una sociedad a través de todas las personas, sin dejar a nadie fuera. Siempre les hablaré a los y las jóvenes, quienes deben construir su propio futuro, desde la resiliencia. Y me refiero a la resiliencia de quien ha sabido caer, ha sentido la muerte, está pisoteado y desde ahí decide desobedecer, luchar valientemente, esa es la resiliencia. Cuando trabajé como jornalero en la construcción, me di cuenta de que para hacer cualquier construcción hay que hacer un hoyo pro- fundo y meterse en él. Ensuciarse los zapatos y las manos y desde ahí construir y avanzar hacia arriba. Esto es importante, tanto para la vida como para el arte. Te permite hablar desde la situación y comprender que no podemos romantizar la discapacidad, ni a la clase proletaria o a la pobreza. Tampoco romantizar la resiliencia como algo hermoso, porque más bien es una lucha, llena de cargas y heridas, pero una lucha que debemos dar. Nosotros lo intenta- mos, cada una de nosotras y nosotros dejará una huella. Puedo mi- rar a mi hijo a los ojos, y decirle que lo intenté, que soñé un mundo mejor para él y para todos y todas y luché, luchamos, no me quedé como pobrecito y no dejé que me pasaran a llevar. Nos fue bien, o nos fue mal, pero lo importante es movilizarnos, unirnos, dar las lu- chas colectivas y como dice la canción “¿Quién dice que todo está perdido? Yo vengo a ofrecer mi corazón”.