Gabriela Mistral y la Universidad de Chile
55 PRIMERA PARTE: 1889-1912 la república. Cada nueva revisión de los vínculos de la joven Mistral revela más líderes y educadores locales de la provincia que reconocieron su ta- lento excepcional y su incansable esfuerzo. Amistades que amortiguaron, al menos parcialmente, la red de normas restrictivas, prejuicios y hechos insólitos que conspiraban en su contra. No sorprende entonces que no durara tanto en el puesto del Liceo de Niñas de La Serena. Fue despedida a través de un sumario de la Escuela Normal de La Serena en 1906 y, luego, del Liceo de Niñas de La Serena en 1909, pues su posición crítica ante la Matanza de Santa María de Iquique la hizo ser considerada socialista 49 . En ese momento pareciera que Lucila Godoy decidió recurrir al mecanismo que el sistema educativo había desarrollado como una vía pa- ralela para que personas como ella pudieran demostrar su competencia en materias para la enseñanza escolar: los mismos exámenes que rendían los docentes titulados. Esta posibilidad se inscribe, justamente, en la necesi- dad del Estado de contar con personal para las aulas con el propósito de abastecer el objetivo nacional de aumentar la cobertura de la instrucción primaria, como se ha señalado anteriormente. Más allá de la excepcional presencia personal de Lucila Godoy, quien se mostraba con notable dignidad y seriedad en sus trabajos, también des- taca la seguridad con la que expresaba sus preferencias literarias. Sabía que era una figura inusual. Basta considerar, por ejemplo, su historial de publicaciones. En un periodo comprendido entre 1904 y 1918, escribió y publicó 98 poemas y textos en prosa en distintos periódicos y antologías de su provincia natal de la región de Coquimbo; más que cualquier otro autor de su época 50 . Eso que la hacía tan prolífica no era exclusivamente el deseo de ilustrar a sus coterráneos. Más bien, publicar fue el principal medio que desarrolló para demostrar su competencia profesional como profesora. En este periodo, comienza a firmar como Gabriela Mistral (a partir de 1908). 49 Es la propia Lucila Godoy quien lo narra en dichos términos en 1909, 1915 y 1920, como ha se demostrado en Mistral. Una vida (Horan, 2024). 50 Rolando Manzano, Gabriela en Coquimbo (La Serena: Editorial Universidad de La Serena, 2015), 190.
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=