El crimen de la calle Nataniel: Testimonios, fotografías y documentos del caso que revolucionó la odontología forense en Chile
Corona de flores naturales enviada por don César Fischer, y varias otras que no anotamos . (Alas, 1909) El mismo ministro alemán barón Hans von Bodman hizo el siguiente discurso: Señores: Cuando hace un pocomás de un año yme- dio llegaba al terreno de mi nueva esfera de traba- jo, por cierto, no presentía que tan luego tenía que cumplir con el triste deber de llevar a la tumba a un miembro de la legación, cuya dirección me ha- bía confiado SuMajestad el Emperador. Profundamente conmovido por el repentino y te- rrible destino que puso fin a una vida floreciente, estoy ahora aquí reunido con ustedes, señores, para entregar al querido extinto a su última mo- rada. Pero, antes de entregar a la madre tierra los restos mortales, deseo hablar del excelente em- pleado y del conspicuo colaborador, cuya muerte me llena de indecible tristeza. La patria se recordará con tierna gratitud del que murió en el ejercicio de sus deberes, víctima del pu- ñal traidor de un cobarde asesino. Con letras de bronce quedará grabado en los anales de la legación, para su eterno recuerdo, el alevoso atentado. No obstante, de ser un fiel servi- dor de Su Majestad Imperial, él amaba con el mis- mo cariño a Chile como su tierra nativa. Con verdadera idolatría quería a su señora esposa y su pensar y anhelo tenía por único fin de formar una existencia para asegurar el porvenir de este ser querido. Hace poco, había recibido la noticia tan esperada que le daba seguridades de su incorporación defi- nitiva en el servicio Imperial. Cuando ya se veía libre de todas preocupaciones respecto a su porvenir, la muerte le sorprendió. El difunto era unhombre dotado de cualidades nobles y de un corazón bondadoso. Era un hombre que no podía ver sufrir a nadie y a quien, todos los que lo conocían, lo deben haber querido y apreciado. En este momento solemne, señores, debo declarar, que este amigo idealista y entusiasta no era capaz de ninguna acción indigna, y lo declaro aun con más firme convicción porque tuve ocasión de cono- cer y profundizar la nobleza de su alma. Quisiera que tú encontraras en el cielo lo que tanto anhela- bas en la tierra: El descanso y la paz. Foto N° 149. Esta foto da cuenta de lo mismo y el texto relata lo sucedido. Las fotos ocupaban casi la mitad de una página completa de la revista Zig-Zag BIBLIOTECA NACIONAL DE CHILE. Revista Zig-Zag (1905-1964). Memoria Chilena. Disponible en https://www.memoriachilena . gob.cl/602/w3-article-3684. html. Accedido en 20/4/2025. 147 Capítulo 6 . Miércoles 10 de febrero de 1909.
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