Patología de hombro

Universidad de Chile Departamento de Ortopedia y Traumatología 62 Quirúrgico Existen múltiples alternativas de manejo quirúrgico, desde estrategias con preservación de la articulación, así como procedimientos de reemplazo articular. A) Cirugías de Preservación Desbridamiento artroscópico: No existe evidencia de alto valor que recomiende el uso por sí solo de este procedimiento, se limita a reportes de casos y recomendaciones de expertos. Incluye la remoción de cuerpos libres, escisión del tejido desvitalizado, sinovectomía y en ciertos casos microfractura de lesiones osteocondrales. Diversos autores recomiendan este procedimiento para estadios precoces (Cruess I-II-II), pero no suele alterar la progresión de la enfermedad, pese a ofrecer favorables resultados en cuando a alivio del dolor, mejoría en rango de movilidad y eliminación de síntomas mecánicos. Se puede utilizar en conjunto a otras estrategias como la descompresión del núcleo Descompresión del núcleo: Su uso se limita principalmente a NAV en etapa I y II en pacientes refractarios a manejo conservador. Consiste en realizar perforaciones en el hueso necrótico, con el fin de inducir y estimular la neovascularización. Algunos estudios recientes evidencian buenos resultados en cuanto a scores funcionales en 88-100% de los pacientes. Sin embargo, su eficacia decrece en estadios avanzados, con buenos resultados obtenidos en solo el 70% y 14-16% de pacientes en etapa III y IV, respectivamente. Existen múltiples técnicas tanto abiertas como artroscópicas, aunque pareciera no ser útil para todas las etiologías previamente descritas, como es el caso de pacientes con NAV secundaria a anemia de células falciformes, quienes pese a someterse a este procedimiento, progresan rápidamente a etapas III y posteriores a mediano plazo Injertos: existen múltiples métodos descritos para pacientes con NAV en etapa Cruess I- II-III, principalmente en pacientes jóvenes en quienes se intenta postergar el reemplazo articular. El uso de injertos pudiera enlentecer el progreso de la enfermedad, mas no producir la regresión. Existe evidencia que ha demostrado buenos resultados en etapa I y II, pero en III y posterior la literatura es incierta. Mejores resultados son observados al ser combinados con descompresión del núcleo. B) Reemplazo articular : a la fecha, los procedimientos de reemplazo articular permanecen como el tratamiento de elección en pacientes con NAV en etapas artrósicas (IV y IV). Las opciones incluyen prótesis parcial de superficie (Resurfacing), hemiartroplastia y prótesis total de hombro. Resurfacing de la cabeza humeral: este procedimiento incluye una mínima resección de la cabeza humeral y la aplicación de un capuchón de metal que articula con la cavidad glenoidea. Existe evidencia satisfactoria en cuanto a la disminución del dolor, mejoría en rango articular y buenos resultados funcionales. Se recomienda el uso de prótesis parciales de superficie en pacientes que presenten un área bien definida de pérdida de cartílago, no excesivamente grande, sin daño glenoideo y buen stock óseo, usualmente pacientes en etapa III de Cruess. Además, al conservar gran parte del hueso nativo, exhibe la facilidad de

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