Salud Global. Los riesgos para Chile y América Latina

SOLIMANO & RAMIREZ 112 migratorios, las que van desde la búsqueda de mejores oportunidades laborales hasta la huida por persecución y conflictos en el país de origen. Si bien la migración no es un fenómeno nuevo, en la última década no solo se ha incrementado significativamente, alcanzando una cifra de 244 millones de inmigrantes en el mundo (OECD, 2013) con más de 20 millones de ellos en condición de refugiados (OIM, 2008), sino que además se han experimentado cambios considerables en los patrones de los movimientos migratorios, complejizando en gran medida el proceso. Una de las razones detrás del aumento de la movilidad de la población se encuentra en la mayor conciencia de las oportunidades de vida que existen en otras partes del orbe. Esto debido a las facilidades que otorga el proceso de la globalización, que incluye la liberalización del comercio, la comunicación electrónica, y la modernización del transporte internacional. De este modo, los migrantes pueden mantener nexos entre el país de origen y el de residencia, trasladándose en forma regular y manteniendo relaciones familiares o laborales en ambos países. La globalización no sólo ha generado un aumento en el número de migrantes, sino que también ha modificado las formas del movimiento migratorio, cambiando la histórica migración unidireccional por una de tipo circular. Es así como naciones que en el pasado fueron reconocidas como origen hoy surgen como destino para los migrantes; e incluso se presentan en forma simultánea como países de origen, tránsito y destino, situación que impacta indiscutiblemente en la conformación demográfica de la población mundial. En cuanto a la distribución es posible señalar que en Europa, Norteamérica y Oceanía los inmigrantes equivalen al 10% del total de su población, en tanto que en el continente africano, asiático y en Latinoamérica y el Caribe la población de inmigrantes no supera el 2%. Además, más del 50% de la población de inmigrantes internacionales nació en África, desde donde migraron 26 millones de personas entre el periodo 2010-2015 (OIM, 2008). Dentro de los países receptores destacan Estados Unidos, Alemania y Rusia, siendo

RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=