Libro blanco del audiovisual comunitario en Chile
80 Chiara Sáez y Jorge Avilés “Lo veo mediante los comentarios que uno ve en las redes sociales. Te comentan, no lo sé: ‘Gracias por mantener- nos informados, por mostrar esto’. Entonces uno lo ve, observa que la comunidad se siente representada porque nosotros vamos a grabar según nuestros lineamientos, nuestra línea política y no otro tipo de información. Si hay una actividad, de cultura, por ejemplo, se va a grabar a la plaza, o se va a grabar un acto dirigido a los derechos humanos. Eso es lo que se va mostrando”. (Entrevistada i, región Metropolitana i). A su vez, un entrevistado señala las dificultades de integrar a la comunidad en el quehacer del proyecto televisivo por el desconocimiento práctico y teórico sobre el rol que tienen los medios comunitarios en el desarrollo de las comunidades. “Es difícil hacer televisión comunitaria con ciudadanos que no tienen mucha preparación con el hacer comu- nitario, así también el lograr hacer una estética como medio que tenga lineamientos claros y palpables. Si nosotros armamos un dossier , un escrito, y les decimos: ‘Ya chiquillos del canal, léanse este mamotreto, que de aquí sale lo que tienen que hacer en el programa’, en realidad es complejo, pero es a lo que aspira la televisión comunitaria: hacer en comunidad”. (Entrevistado i, región del Libertador Bernardo O’Higgins). La imaginación comunitaria Se propuso a los participantes la siguiente situación ficticia: “Supongamos que es el aniversario de la población / villa / pueblo / ciudad donde se encuentra situado su canal, a raíz de lo que hemos conversado ¿cómo sería su
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