Libro blanco del audiovisual comunitario en Chile
41 La estética del audiovisual comunitario. Preguntas y hallazgos neral y parece agudizarse con los avances tecnológicos. Esta condición deficitaria común resulta sin embargo esperanzadora, toda vez que no depende necesariamente de los recursos financieros mayores o menores con que se cuenta, sino más bien del potencial creativo de los emisores. Por otra parte, uno de los riesgos presentes al desa- rrollar un medio de comunicación alternativo es invadir todos los contenidos transmitidos de un discurso polí- tico-reivindicativo, de denuncias, incluso de consignas, pero que desdibuja las diferencias entre una experiencia de comunicación alternativa y cualquier experiencia de prensa o comunicación partidista, ya sea por afiliación u oposición a un gobierno o sistema político. En el caso de los medios audiovisuales, el problema también se plantea vinculado con los desafíos propios del lenguaje de la imagen, con los que a menudo los grupos reivindicativos están menos socializados que con el lenguaje escrito. Con frecuencia se pierde de vista que el lenguaje audiovisual es un lenguaje integrado, en el que la palabra, la imagen y el sonido forman un todo unificado y coherente; fruto de un proceso de creación en el que, desde la fase de diseño, ya se piensa en imágenes (Marí Sáez, 2004). Al abordar esta temática, también hay que volver al debate sobre la representación de la realidad que dominó el ámbito del cine y el documental sobre todo durante los años 70, la que apuntaba al desarrollo de una reflexión sobre la producción del mensaje cuando éste quiere expresar la realidad, reflexión que surge a
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