El liceo en tiempos turbulentos: ¿Cómo ha cambiado la educación media chilena?

el valor de la comunidad 257 hacerlo democrático» (inspector general). Este énfasis en la participación de la comuni- dad escolar, concordante con el proceso de democratización general que estaba viviendo la sociedad chilena, se expresó en la forma en la que se definieron las prioridades y las acciones a ejecutar durante su implementación: «Los profesores trabajaron en pos de este proyecto (…) hubo participación en las decisio- nes, se involucraron en el proyecto, y yo creo que eso lo internalizaron, porque hasta hoy en día yo creo que los profesores siguen manteniendo las mismas prácticas pedagógicas, y el problema se dificulta cuando hay nuevos profesionales que se incorporan y que no conocen la filosofía (…) y tampoco la política educacional del establecimiento» (profesor). De esta manera, el proyecto se proponía fomentar la participación juvenil en el quehacer cotidiano del establecimiento, haciéndose cargo de la creciente preocupación por la tensión existente entre la dinámica del mundo escolar y el mundo juvenil, en el contexto de la masificación de la educación secundaria y de un país que venía apenas saliendo de una dictadura. La comunidad escolar, en consecuencia, decidió darle un fuerte impulso a las actividades que privilegiasen la participación y protagonismo de los estudiantes, mediante iniciativas como la edición de un informativo escolar y la creación de la Radio Gabriela, gestionada por la organización estudiantil. En el mismo periodo es implementado en el liceo el programa MECE-Media de los talleres de libre elección ACLE, instalando procedimientos de consulta a los estudiantes sobre sus intereses, que se mantienen hasta el día de hoy. También se crean las academias, espacios para el desa- rrollo de intereses específicos de los alumnos. Además de las actividades mencionadas, se estimuló el desarrollo de trabajos volun- tarios en la comuna y se institucionalizó el Centro de Alumnos (CAA), estableciéndose un conjunto de prácticas democráticas vinculadas a la forma de elección, que siguen operando en nuestros días: «Se hizo un proceso que se hace en todo proceso eleccionario, en el cual hay registros, los alumnos, SERVEL, hay digamos en este caso apoderados, hay listas que se presentan, hay debate, las mesas están constituidas, existe un presidente, vocales, todo por sorteo, todo eso, y en el proceso eleccionario, ellos deben presentar su carné, firmar registro e ir a la urna» (profesor). En materia de prácticas pedagógicas se produjeron importantes transformaciones, como la implementación de las salas temáticas o «centros participativos de aprendizaje» 11 , que se mantienen hasta hoy, y consisten en aulas acondicionadas con materiales didácticos para cada asignatura y una pequeña biblioteca, a las que asisten diferentes cursos a lo largo de la jornada. Se trataba de traer «un poco de la experiencia que tiene el sistema univer- sitario al colegio [permitiendo] que los estudiantes pudiesen tener más autonomía y más responsabilidad» (profesora). Además, se estimuló a los docentes a probar nuevas metodo- logías de trabajo, muchas de las cuales fueron aprendidas en instancias de capacitación e 11 Mineduc, 2000.

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