Amaranto: principios y experiencias para su cultivo en Chile

54 Amaranto: Principios y experiencias para su cultivo en Chile rastrojos); finalmente, la eficiencia de fertilización estará determinada por el sistema radical de las plantas, el tipo de suelo, tipo de fertilizante y forma química, la ubicación del fertilizante, la dosis y el sistema de riego 120 . Desde el punto de vista de la fertilización, son escasas las evidencias científicas rigurosas en amaranto que demuestren cuáles son los requerimientos nutricionales del cultivo y la curva de extracción de nutrientes en función de sus estados fenológicos, aspectos claves al momento de recomendar niveles de fertilización para este cultivo. Es así como, en este capítulo se recolecta información científica disponible sobre fertilización en amaranto, enfocándose principalmente en los elementos primarios y donde se ha estudiado la respuesta del cultivo frente a la fertilización inorgánica, orgánica y órgano- mineral. En el cultivo de amaranto se ha determinado una correlación positiva entre la fertilización nitrogenada, la producción de biomasa y el rendimiento en granos, encontrándose respuesta hasta 300 kg N ha -1 121,122,123,124 . La mayor parte de los estudios demuestran que el aumento en rendimiento de las plantas con el aumento del N se basa en un mayor número de granos por planta 96,97,99,125 . Para la variable peso de 1.000 granos los resultados no son concluyentes, observándose aumentos en algunos casos y disminución en otros 118,121,126 . Cabe destacar que otros estudios han demostrado que dosis altas de N pueden provocar pérdida de rendimiento, debido a un mayor crecimiento vegetativo en desmedro del reproductivo, lo que genera bajos índices de cosecha 112,127 . Este mayor crecimientoestáasociado, enparte, a lamayor alturaque logran las plantas, provocando problemas de tendedura 128,129 . Por el contrario, deficiencias de nitrógeno generan plantas con un amarillamiento temprano, retraso en el crecimiento y emergencia prematura de la panoja, lo que trae como consecuencia una baja producción 130 . Estudios llevados a cabo en A. hypochondriacus , determinaron una demanda de N de 86 kg ha -1 para obtener 1.000 kg de granos, observándose que la mayor demanda de todos los elementos fue entre los 82 y 123 días después de la siembra, periodo que coincidió con las etapas fenológicas de máximo crecimiento vegetativo, floración y llenado de grano; además 30% del N se acumuló en la inflorescencia y 20% en grano 131 . Otros estudios han reportado requerimientos de N entre 130 a 210 kg ha -1 para rendimientos de 1.400 y 3.000 kg ha -1 de granos 132 . La eficiencia en el uso del nitrógeno (EUN), es un parámetro que compara la producción de granos (rendimiento) con la cantidad de nitrógeno aplicado, reportándose hasta 7,9 kg de amaranto por kg de nitrógeno 133 ; sin embargo, esta eficiencia varía en función del genotipo, las condiciones ambientales y de manejos durante el desarrollo del cultivo. En general, el amaranto se ha reportado como un cultivo relativamente ineficiente en el uso de N, principalmente debido a su bajo índice de cosecha promedio (IC = 9 y 20%, IC: relación entre el rendimiento en granos y la biomasa total producida por la planta) e índice de cosecha de N (ICN = 12–26 %; ICN: relación entre el N acumulado en el grano y el N acumulado en el granos más la paja o residuos de la cosecha).

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