Los Jirondinos chilenos

·- 27 - dos lengnas basta i sobra, porqne por machas que hable un bachiller, no será nanea sino nu solo bachill er, miéntras Cárlos V fué a la vez rei i emperador i todo lo qne qn1so ... Como a los dos Amnnátegai, moderados, tranquilos, estudiosos, tí1nido8 tal vez, pero consecuentes i asídllOA a toda tertulia de la tarde, babíauseles asignado norn– bres mas sociales qne políticos, así los padrinos del club ignalitario de la easa Vial-Formas, apartaron discretamente dignidades de Ja iglesia para los dos sa– cerdotes, que habían encontrado cabida en aquella asamblea 1 iberal, cerrada hoi hertnéticament.e a la tonsura i a la mitra e'n nornbre de la libertad mirabo– Jante de la época. En la Convencioo de 93 bnbo diezi . nueve sacerdotes, pero los ajitadores de Santiago, t.odos sinceros católicos, con la escepcion de Francisco Bilbao i de Santiago A.reos, solo pronunciaban el nombre del vice- presidente Eyzagnirre asociado al del abate S1É– YF.S, el famoso vicario de Chartres, i el del diputado Taforó al del obispo GREGOIRE, convencional i filán – tropo. ¿Era aquella mitra nn aognrio? Pedro Ugarte, que no solo no era libre pensador sino ascético devoto i creyente a firme, había recibido el nombre de DANTON, i por cierto qae, aparte el culto, no babia bautizo mejor eocontra<lo para aquella nata– raleza enérjica, impetuosa i llena de recursos. De igaal manera dieron el ape}Jido de SAINT-JusT a Manuel Bilbao, por su notable semejanza con el hermoso trian– viro frances , cayos ojos azolea i larga cabellera lle-

RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=