190 años de la carrera de Obstetricia de la Universidad de Chile 1834-2024

60 recónditos del país, por su presencia en todo el territorio nacional logrando con- solidar el acceso a salud sexual y repro- ductiva de manera universal y garantizar el pleno ejercicio de los derechos a todos los habitantes de nuestro país. Sin embargo, los cambios sociales y epi- demiológicos de nuestro siglo hacen ne- cesaria la re-formulación del “Programa nacional de salud de la mujer” hacia un “Programa integral de salud sexual y re- productiva” que logre incorporar las ne- cesidades de salud sexual y reproductiva de todas las personas durante todo el curso de vida, reconociendo a las matro- nas y matrones como los profesionales idóneos en esta tarea. La realidad de Chile del siglo XXI es muy distinta de la que inspiraron la creación de la escuela de obstetricia hace casi 200 años. Un país con una población mayori- tariamente urbana, con mayores índices de migración, mayores recursos econó- micos y culturales, con mujeres cada vez más incorporadas a la actividad econó- mica productiva e intelectual, con disi- dencias sexo genéricas que luchan por mayor reconocimiento, requiere de otro tipo de profesional que enfrente los desa- f íos en salud sexual y reproductiva des- de una perspectiva biopsicosocial. Para esto, es fundamental la formación de ma- tronas y matrones con un profundo rigor científico, análisis crítico, vocación social y humanista, que estén comprometidos con una población cada vez más cons- ciente de sus derechos. Los nuevos ámbitos de acción van des- de la participación en la formulación de políticas públicas y sanitarias, la gestión en calidad y seguridad de los servicios de salud, la prevención de la violencia y discriminación por motivos de género, la mejora significativa de la calidad de vida en periodo climatérico, la erradicación del cáncer cervicouterino, la salud men- tal perinatal, la humanización del parto y los derechos sexuales y reproductivos; entendidos como la autonomía plena para tomar decisiones libres e informa- das en cuanto a la vida sexual y repro- ductiva, y de ejercer su sexualidad y re- producción sin ningún tipo de coacción y/o violencia, son desaf íos enormes pen- sando en las grandes inequidades de la sociedad chilena. Al hacer esta pequeña revisión de la historia de la obstetricia en nuestro país y a 190 años de la fundación de la primera escuela de obstetricia por el medico francés Lorenzo Sazié, resul- ta indiscutible entender que gran parte de los logros de la salud de Chile están vinculados al trabajo de las matronas y matrones de nuestro país, así como tam- bién es incuestionable el rol protagónico que deben tener en los desaf íos para los próximos años, poniendo siempre en el centro la salud de las mujeres y los dere- chos sexuales y reproductivos. Cap. 7 Sección 2. Con el desarrollo del Servicio Nacional de Salud a mediados del siglo XX, fueron parte fundamental de la tarea de disminuir la mortalidad materna e infantil

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