Innovación para la sostenibilidad: custodia ambiental del Parque Carén

Índice Capítulo 1 Capítulo 2 Capítulo 3 Capítulo 4 Capítulo 5 Capítulo 6 Capítulo 7 Capítulo 8 Cuadro N°1. Número de plantas vasculares por clasificación taxonómica y sector del Parque. CuadroN°2. Número de plantas vasculares por origen biogeográfico y sector del Parque. SECC I ÓN 1 D I AGNÓST I CO 43 Plantas vasculares En el Parque se ha encontrado evidencia de 172 taxa , distribuidos en 57 familias y 28 órdenes (Cuadro N°1). Los cerros Amapola y La Puntilla cuentan con una gran cantidad de taxa respecto al total del Parque (53 y 46%, respectivamente). En el primero, 28 taxa sólo ocurren dentro de él, destacando la als- troemeria Alstroemeria pulchra Sims. Por otro lado, en el cerro La Puntilla, 26 taxa sólo ocurren en él dentro del Parque, de los cua- les 16 se encuentran en el lugar azonal. Gran proporción de los taxa de plantas vasculares dentro del Parque Carén (64%) se distribuyen naturalmente dentro de Chi- le ( i.e. endémicas y nativas; Cuadro N°2). En términos de endemismo destaca el Cerro La Puntilla, el cual tiene la mayor proporción de especies endémicas del Parque (62%), y la mayor proporción de endémicas respecto a su propia composición florística (47,5%). Por su parte, el Cerro Amapola le sigue en canti- dad de especies endémicas con 33 taxa . Tanto el lugar azonal del Cerro La Puntilla como la exposición sur del Cerro Amapola sobresalen del resto de sectores por la can- tidad de especies endémicas y nativas que solo se encuentran en ellos, con 15 y 14 taxa , respectivamente. Aeste respectodestacaLa Puntilla, que cuenta con las cuatro especies de helechos palito negro del Parque, siendo tres de ellas ( Adiantum gertrudis Espinosa, A. chilense Kaulf. var. hirsutum Hook. & Grev., y A. excisum Kunze) exclusivas de este sector. Los mayores niveles de riqueza de espe- cies exóticas los tienen el Cerro Amapola (36), la ribera de la laguna (30) y la planicie (29), particularmente en zonas cercanas al uso público del Parque. En el caso del Cerro Amapola, esto se verifica en su ladera sur, la cual está cercana a la infraestructura vial y la entrada del Parque. Por otro lado, en la ribera y planicie esta riqueza se concentra en las zonas de uso intensivo con fines re- creacionales, de ocio y deportivos. Ambas situaciones coinciden con Kowarik (2003)4, quien plantea que la dispersión de especies exóticas está relacionada con la presencia del humano.