Magallanes 1520-2020: historias, pueblos, imágenes

El primer viaje imaginario al extremo sur del globo – 391 “Aborrecen a Júpiter, que avinagra el vino con su trueno y malogra las mieses con su lluvia inoportuna. Vi un bonito santuario consagrado al Dios Tiempo, el más grnade devorador de cuanto existe, en el que hay un bajo relieve que representa con singular maestr a a Saturno como tumba de sus hijos” (Hall: 2010, p 117) Viraginia: pa s de las mujeres, enclavada en un sitio geográfico conocido como La Tierra de los Loros. La capital de esta nación es Ginecópolis y de igual manera, los topónimos tienen la connotación sexual que lo masculino habitual- mente ha elaborado en torno a lo femenino: Garrila, Eerico, Ploravia, Lingua- docia. Esta comarca comprende cuatro provincias: Afrodisia, cuya capital es Desvergonia, lugar en que las mujeres obligan a los hombres a prostituirse; Las Islas Hermofroditas, habitadas por los bisexuales; Amazonia, zona de las mujeres pendencieras; Eugima, sitio de las mujeres buenas, que finalmente los viajeros encuentran desierto. Se supone una democracia perfecta basada en la máxima “todas mandamos, ninguna obedece”, regido por un parlamento de carácter per- petuo, donde todas las mujeres hablan al un sono sin escucharse y las leyes son eternamente revocables. Existe el acuerdo unánime de odiar a los hombres. “Muy pocas viraginenses son nativas. Han confluido aqu de todas las partes de la tierra, unas expulsadas por su extrema fiereza para con los maridos, otras exiliadas voluntariamente por la extremada crueldad y celotipia de sus maridos. Las que jan llegado porque, al dominar sus maridos, han sido expulsadas junto a ellos por mantener esta relación de poder contraria a la justicia, residen en ciudades fortificadas de las zonas fronterizas del reino, formando parte de sus guarniciones militares “ (Hall; 2010, p.164) Se filtra claramente en la construcción de Hall todas las nociones masculinas de la Europa de aquel momento. Moronia: pa s de los necios y el de mayor densidad demográfica, basado en la premisa de que los tontos son legión. Describe la zona de esta suerte, reflexio- nando en torno a la noción de ant poda: “Es un pa s situado bajo el mismo polo antártico, justo al contrario que el pa s de los pigmeos, que lo está bajo el ártico, cosa que me hace barruntar que la razón de que los pigmeos sean tan diminutos y los moronios tan estúpidos es la misma, a saber, el fr o intens simo de ambas regiones. En este asunto la natu- raleza se muestra exquisitamente consecuente al producir mediante el excesivo alejamiento del sol, la deformidad del cuerpo en una de las zonas, la del alma

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