Magallanes 1520-2020: historias, pueblos, imágenes

358 – magallanes 1520-2020: historias, pueblos, imágenes brica desechó” (47). Ambas fueron construidas con retazos y residuos. La basura que utilizan para construir sus viviendas identifica a los sujetos, esa “Gente de mierda. Gente del norte” (114) como se la nombra en “Los propietarios”. Basura concreta, material que se deshecha y sujetos basurizados, excluidos y evacuados del sistema (Silva Santisteban, 2008) 8 . A nivel del discurso de los personajes, se reconoce la exclusión, pero no se la comprende. El personaje del primer cuento No quiere ser como ellos, pero mientras más se esfuerza, más se empeña, más cerca se siente de aquellos de los que se quiere alejar. Vivir abajo o vivir en la montaña. Llegar ayer o hace 50 años. ¿Por qué era ser distinto, si él no se sent a distinto? (64). El espacio, reproduce al interior la misma representación del l mite, de un adentro y un afuera, que ahora además se traslada a los sujetos que la habitan, un ellos y un nosotros también móvil según quién lo enuncie. Se trata entonces de un espacio, de un lugar practicado e intervenido por sus habitantes en palabras de Michel de Certau; un “sendero abierto a fuerza de machetazos, sudores y to- zudez” (2000: 66) en las del personaje. A pesar de la mirada del otro que lo excluye, para los protagonistas de estas historias la isla es “ese lugar en el fin del mundo, tan lejos de todo” (67) en el que han ca do. Es todav a, paradójicamente, un espacio de oportunidad frente al pasado de escasez y al vac o del presente que se representan en el único objeto que posee Cárdenas, “el preciado reloj”, y en el baño que proyecta el personaje del primer cuento y que es mucho más que eso. 8 Rocío Silva Santisteban al reflexionar en torno al asco en el marco de discursos autoritarios plantea que esta categoría permite organizar simbólicamente a un otro que será evacuado del sistema y postula, siguiendo a Castillo, la basurización como residuos entendidos en sentido material y discursivo.