Magallanes 1520-2020: historias, pueblos, imágenes

276 – magallanes 1520-2020: historias, pueblos, imágenes 3.3 Procesos de objetivación de prácticas lingüístico-comunica- tivas Algunos de los argumentos ideológicos presentes en informes técnicos, confe- rencias y art culos en los que se dieron a conocer los resultados de las misiones que consideramos, aunque se visualicen como aparentemente contradictorios, son en verdad complementarios. Mediante descriptores de ajenidad y extrañeza se otorgaba valor de novedad y de relevancia cient fica a los datos lingü stico- comunicativos consignados, en tanto que, por medio del resalte de la afinidad respecto de otras lenguas europeas o americanas, se realizaba simbólicamente la integración de las mismas al campo. Muchas expresiones despectivas basadas en datos insuficientes y en una concepción etnocentrista de la superioridad de las lenguas europeas representaban las de la región como “extraño y pobre lengua- je” (ona, Andersson, 2004: 126), “pobre e incapaz de expresar ideas abstractas” (yagán, Martial, 2005: 240) o “pobr sima de palabras” (alakaluf (kawésqar), Ca- ñas Pinochet, 1911: 393). Recordemos que estas apreciaciones se realizaban en un contexto en el que la disponibilidad de sustantivos abstractos y mayor cantidad de cuantificadores de número, as como la posibilidad de flexión de las bases lé- xicas, conformaba criterios que se cre an válidos para medir la “inteligencia” de los grupos étnicos o reconocer posiciones relativas en una estratificación de las culturas. Es por ello que las representaciones mencionadas, no obstante, fueron disputadas por otras voces que sostuvieron en el caso del selk’nam su riqueza en voces (Nordenskjöld, 1897: 163-164; Holmberg, 1906: 52), as como mediante la autocr tica de quienes –como mencionamos más arriba en el caso de Cañas Pinochet– entendieron que una sintética documentación daba cuenta de modo muy parcial de la situación que describ an. 9 En tanto las recopilaciones orales deb an necesariamente transcribirse para ser conservadas, las primeras dificultades se hallaron al momento de la trasposi- ción a la escritura. En esta fase de la vinculación de agente cient ficos y pueblos originarios no se observan estrategias para salvaguardarlas mediante el uso, y en cambio se estableció como única manera de resguardo y perpetuación la docu- mentación escrita lineal, tecnolog a con la que los hablantes de los pueblos es- taban poco familiarizados. En las fuentes se reiteran expresiones de ajenidad al realizar el reconocimiento intuitivo de recursos fónicos y paralingü sticos poco usuales en las lenguas europeas. La presencia y frecuencia de fonemas glotales o aspirados llevó a valoraciones estereotipadas que las describen recurrente- 9 “Lo único que siento es que de toda esta región, no he podido hacer estudios continuados y bien fundados, sea ya por el poco tiempo que estuve en relación con ellos, ó por la dificultad mucho mayor de hacerme entender.” (Spegazzini, 1882 b: 173, cf. también 160).

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