El tejido de la memoria: 50 años del Golpe de Estado en Chile

148 El tejido de la memoria de las personas, por ejemplo, la disociación y negación de la reali- dad, la alienación, el distanciamiento entre las gentes basados en el temor y la desconfianza por la traición que significaba la muerte. A lo anterior, se suma el silencio en que se convirtió Chile en los años noventa, lo oscuro de este paisaje territorial, basado en grises, subiendo de tono en lo obsceno y pornográfico, dando pie a todo descontrol para olvidar el pasado de las personas, y con razón o sin ella, había que hacer algo para borrar de la memoria lo sucedido. Entonces la pregunta que cabría formular en este momento sería ¿cómo se recompone un país de un trauma de esa naturaleza, si aún hoy, no se cierran las heridas de las personas que perdieron a su fa- milia y que todavía no la encuentran? ¿Cómo se recompone un territorio con esta fragmentación, si las condiciones para que se vuelva a imponer una dictadura, están a la orden del día? ¿Cómo se recompone un país dolido, fragmenta- do, quebradizo y enajenado? ¿Cómo se recompone un territorio destrozado y lleno de ca- dáveres en sus calles, sin que nadie pueda reconocerlos, porque se- rían masacrados de igual manera? La generación de esta época, la que supuestamente no tiene miedo a morir, está viviendo la muerte en vida.