Position Paper: Aproximaciones transdisciplinarias sobre actividad física: construcción de posiciones y propuestas

intensidad de la actividad física se incrementa el gasto energético, lo que se asocia a un aumento de la percepción de esfuerzo o de dificultad para realizar dicha actividad por parte de cada persona (Bull et al., 2020). Sin embargo, se observan desigualdades en la participación en activida- des que propendan a aumentar los niveles de actividad física en la pobla- ción por edad, género, discapacidad, embarazo, nivel socioeconómico y lugar de residencia, lo que releva la necesidad de aumentar la inversión de las políticas públicas en actividad física (Bull et al., 2020), a fin de disminuir la prevalencia y costo del manejo de enfermedades no trans- misibles (Ding et al., 2016). Se ha demostrado que las personas adultas que realizan actividad ae- róbica y de fortalecimiento muscular en su tiempo libre, siguiendo las recomendaciones publicadas de realizar al menos 150 minutos de acti- vidad física moderada o 75 minutos de actividad física vigorosa (Piercy & Troiano, 2018), presentan un riesgo muy reducido de mortalidad por todas las causas y por causas específicas, asociándose con importantes beneficios (Kraus et al., 2019; Zhao et al., 2020). El incumplimiento de las recomendaciones de actividad física por par- te de una persona o grupo de ellas, se denomina inactividad física, y se asocia con morbilidad y mortalidad prematura. La inactividad física es responsable de una carga económica sustancial a los distintos sistemas de salud a nivel mundial (Ding et al., 2016; Hallal & Pratt, 2020) Es importante considerar que la práctica de actividad física es capaz de modular en nuestro organismo la condición física, aspecto que puede en- tenderse como la capacidad de realizar actividades de la vida diaria con facilidad y sin fatigarse, y se asocia con un bajo riesgo de desarrollar de manera prematura enfermedades relacionadas con la inactividad física. Los componentes de la condición física que tienen una mayor relación con la salud y la calidad de vida incluyen la resistencia cardiorrespiratoria (también llamada capacidad aeróbica), la composición corporal, la fuer- za muscular, el equilibrio y la flexibilidad (Vanhees et al., 2005). Cada uno de los componentes de la condición física puede ser evaluado mediante pruebas específicas que están validadas para distintas pobla- ciones, asociándose algunos de ellos al estado inflamatorio de una per- sona (Delgado-Alfonso et al., 2018). El tener una buena condición física, permite que las personas puedan realizar actividad física con mayor faci- .33. POSITION PAPER N°4 MARCELO CANO-CAPPELLACCI - GERARDO WEISSTAUB

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