América es la casa. Arte mural y espacio público en Chillán

Rl·:-.uur., dorl·, J d Ct.·nlro ~.,oorul ,!,: Con".·rv.1dón y Rt·g..,1ro dt•l P.tlnmonil, Ani, 1irn Mueble del losti1uto de lk ll.1, :\rtc :,. de .\ k x1co O.w1d O n ..-dn J1m1..' n('1, R,•11.t• 10 Rohcr1 P.1¡-wro..'tl i y l ld t.•n,t Aco:. t.1 l liaz. Rést.tur',l l.' ión 11rnr.1 lc:- fal.'.ud.1 i k s i-:t.,, 1-009. F,;rn.uHh.> .\llrCl..h . N.11. 1,) cu 1~19. Fu,... .1lu11rno J d 1l l.lCS· 1ro L.ture.lrH) Cu..~. v.lf.l. b 1 ~,1(-xico ,; iguió MI'\ t•,1 ud i<•' guna,; .1 uru b t·,.1 )' fue :1yud.m t(• ,le niego llivt'.'1\1. Fue d c."re.idor dd prO}' t'.'c."lO - Pintur.1 Mur',ll" en los pbntdc:- dc educación. Rc.tltló n11..1 r.1k, en l.l <.:melad dd Niilo. En 1~57 rc,1.n1rO loi. mu r.1lc, ,f.._. l),witl Alfa ro Siquciros, (·n la crnd.id de Chi ll i n. 401 \ heredado de las propuestas de Le Co rbusier y la 13auhaus. Todos estos proyectos conci- ben la construcción de un espacio un itario donde la arquitectura del Movimiento Mo- derno es a su vez soporte de la pi ntura mural. Posteriormente, en la búsqueda de nuevas instancias de participación artística en la esfera pública, unidas a los cambios de lellguaje de la plástica nacional, un hito que marcará la existencia de un tercer mo- mento en Chile, es la redacció n del Mani- fiesto del Movimiento de Integración Plás- tica Chilena en el aúo 1953. Impulsado por la presencia de Diego Rivera en el país, el tex to, redactado por los pintores muralistas Fernall<lo Marcos y Osvaldo Reyes, y fir- mado por escultores, grabadores, arquitec- tos y pintores (como Ximcna Cristi, Hardy Wi stuba y Enrique Ruffat), adquirió en su n10111ento un carácter cercano a ]as encen• did,1s declaraciones que los primeros mu- ralistas mexicanos lanzaban en los medios. Valga de ejemplo este fragmento: "Luchar en colltra de los sectores artísticos retró- grados y cosmopoli tas, que hasta ahora han mantenido al arte y al artista plástico nacional, al margen de nuestro pueblo."' 6 En relación a esto debemos enten- der algunos sucesos posteriores, como la const rucción de la Casa del Arte de la Uni- versidad de Concepción con un mural del mexicano Jorge González C1marena, la Es- cuela México de Talcahuano con el mural de la art ista chilena María Martner y la Casa del Arte Diego Rivera ell Puerto Monlt, to- das don,1eiones del Gobierno Mexicano. 17 16 \'t•1 A tw\l) mun. J. 17 A.lenü, J,. , ·, io, c¡c11'1pló-.,i,,: ,kbcmen<1<>n,l1d mui .¡I d1 ,t1\,1,l1) rm Ju.m O 'Go,m.m )' ,·w,u1 ,11fo p<u ~!.An., 1\IJ1t110 ..-n ti D:tlrlt,, 11 () l'u¡u h1w ,11•1 \ ,·n.1 'un e: m!bh,11. f'n b ~melad dt• S.11111.ago. ( 11,16,) El declive del concepto de integración plástica Pero tambi én, en aquellos años, otro suceso cambiaría el rumbo de la inte- gración plástica en nuestro país. La llegada del lenguaje de la abstracción geométrica a Chile, expresado en el trabajo del Grupo Rectángulo - fundado a mediados de la década del cincuenta- que lideraba el pin- tor Ramón Vergara Grez. Siendo innegable su aporte al desarrollo del arte chileno, su rendimiento se puede verificarse en un con- texto rnás amplio, al menos al abordar en forma conjunta el desarrollo del diseño, el arte y la arquitec tu ra. La llegada de las tendencias raciona- listas se verifica primero en la arquitectura y luego en la pintura, por lo que la integración entre ambas se ,-á fruto de un largo proceso, que incluso se desvincula de las técnicas tradicionales para quedarse, principalmen- te, con elementos plásticos concretos como la forma y el color. Como ejemplo se puede observar el caso de la Unidad Vecinal Pro- videncia - proyecto elaborado entre 1953 y 1956, y construido entre 1957 y 1968 en la comuna del mismo nombre- que im- pli có la participación conjunta de arquitec- tos (Carlos Barella lriarte e Isaac Eskenazi Tchimino) con un arti sta visual: Abraham Freifeld. Este último resolvió la decoración de las fachadas mediante la utilización de cerámicas de colores en composiciones ge- ométricas, que se complementaban con la creación de retículas metálicas que, adosa- das verticalmente junto al edificio, seguían ritmos visuales cinéticos en la interacción con la luz solar. 18 18 S1 b 1l'n s,· tf.lt J ,J l' un p rO)'CChJ crK.1r¡,t.1,fo por l., CJ.JJ. de Emple-.ado5 P.ut1culJ.rc:s EMPAR'r, ,•sti:- tJcmplo pQm· en t-n dmc,:i l.1 in1enc,ón dt l1u b.11ocon, unto cntrt· a.mst,l.S )' .irqu1tc<los, .,..,.,,. w, b:IJ\l

RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=