Breve historia de un ajo

Tanto con las actividades realizadas como con la historia que surgió, quisimos confluir en la búsqueda de otras posibilidades en torno al cuidado de la salud. El ajo apreciado y vivo encarna la interdependencia entre lo humano y no humano; es fuente de supervivencia basada en el encuentro con quienes cuidan de su vida y a quienes, a su vez, alimenta. Descubrimos que el ajo forma parte de una memoria valorada por los niños, las niñas y las familias de Quilquico. Así sentimos esta historia, como un relato de protección y cuidados que nos motiva a promover salud a través de la alimentación que provee el territorio.