Caja de herramientas. Estrategias para favorecer la alimentación y deglución de personas con demencia en etapas tempranas

60 Anexo 1: Alimentos para fomentar una dieta mediterránea La dieta mediterránea ha sido reconocida como un patrón alimentario saludable y equilibrado, que contribuye positivamente a la salud cognitiva de las personas. Este enfoque nutricional se caracteriza por el consumo de alimentos frescos, no procesados, que son ricos en grasas saludables y fuentes de proteínas magras. A continuación, se presentan ejemplos de alimentos que integran esta dieta, clasificados según su costo, con opciones accesibles para diferentes presupuestos. Costo bajo: Verduras y frutas frescas como el pepino, el tomate, zanahorias, cebolla, plátano, manzana, naranjas, ensaladas verdes, entre otras. Legumbres, yogur sin azúcar, hierbas frescas como la albahaca, el orégano y el tomillo. Aguas y/o infusiones. Avena. Costo medio: Atún enlatado, huevos, aceitunas, pollo, miel. Arroz y pastas integrales. Costo elevado: Yogur tipo griego, pan integral, aceite de oliva, pescado fresco, cremas o mantequillas de frutos secos, palta, cous cous, queso de cabra.