Recomendaciones para el abordaje psicosocial en la atención de salud de personas con trauma ocuplar y dentomaxilar por violencia de agentes del Estado

9 La respuesta de quien sufre el trauma psicológico tiene ciertas carac- terísticas. Una primera es construir una “zona segura” alrededor de sí mismos, es decir, un ambiente en el cual no se perciba amenaza alguna, principalmente de otras personas. Otra respuesta de la víctima, es tra- tar de entender lo sucedido, pero la ausencia de una estructura cogni- tiva bien organizada induce a pensamientos ilusorios o fantasiosos de control sobre eventos incontrolables o a respuestas conductuales exa- geradas o sin sentido. Esto puede parecer ante los ojos de un observa- dor externo como una conducta irracional, pero hay que considerar que las reacciones ante eventos traumáticos son respuestas normales ante situaciones anormales (Wainrib y Bloch, 1998). Se han descrito otras reacciones y consecuencias psicológicas como el aplanamiento emo- cional, incredulidad, pesadillas, pérdida de la sensación de seguridad del mundo, pérdida de la confianza en los demás, aislamiento social, minimización del incidente traumático, hipervigilancia, sentimientos de desesperanza y alteración de la identidad (Wainrib y Bloch, 1998). Existe evidencia de que personas que han sufrido un trauma debi- do a un acto violento deliberado ejercido por otros, ven afectada su confianza básica en el entorno social. Esta falta de confianza social va en relación directa con la severidad del trauma. Un posible foco de los tratamientos para personas que han sufrido este tipo de traumas es estimular conductas de confianza (Bell et al., 2019). Por lo tanto, es im- portante que ese rol sea adoptado por los equipos de salud, de mane- ra de prevenir el desarrollo de un trastorno de estrés post-traumático (TEPT). Por el contrario, el desarrollo de conductas de poca cooperación por parte del equipo de salud, podrían favorecer el desarrollo de TEPT.

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