Estudio de la gestión adaptativa en Chile: descubriendo elementos para la resiliencia

58 /328 ELEMENTOS INSTITUCIONALES Un aspecto de gran relevancia en la ges- tión colectiva de un recurso es su movi- lidad. La capacidad de cambiar de ubi- cación el recurso, ya sea con libertad y facilidad, o reubicarlo en un lugar menos vulnerable o en riesgo, se considera una forma de flexibilidad para la adaptación. Sin embargo, este aspecto es altamente controvertido, ya que involucra políticas de migración, planificación estratégica a largo plazo por parte del Estado y tam- bién cuestiones de sostenibilidad en la explotación del recurso. En el caso del agua, la flexibilidad podría entenderse como la posibilidad de extraer el recurso desde otro lugar, lo que puede ser una estrategia para superar la esca- sez de agua en el corto plazo. Incluso, podría implicar la movilidad de la acti- vidad económica hacia otra cuenca. En cuanto al segundo punto, actualmente no existe una planificación estratégica vin- culante que permita evaluar la necesidad de modificar una actividad económica. Sin embargo, los Planes Estratégicos de Gestión Hídrica o los futuros Planes de Cuenca pueden contribuir a este diag- nóstico previo. En relación a este tema, el Código de Aguas, y en particular lo establecido en el Manual de Administración de Recursos Hídricos (2008), establece de manera ex- 3.3. Flexibilidad en la movilidad plícita que cualquier cambio en el ejerci- cio de los derechos de aprovechamiento de aguas, incluyendo modificaciones en las obras asociadas, como bocatomas, debe ser sometido a evaluaciones secto- riales dentro de la Dirección General de Aguas (DGA). Estas evaluaciones siguen procesos definidos que, debido a la com- plejidad de los casos, pueden demorar incluso varios años. Además, existe el riesgo de que ciertos aspectos no hayan sido considerados en el balance hídrico en el momento del cambio, como, por ejemplo, el caudal ecológico. De esta manera, la movilidad del recurso hídrico se ve obstaculizada por la posi- bilidad de que el cambio en el punto de captación en el río pueda afectar la can- tidad de agua que se puede captar, junto con los largos tiempos involucrados en los procesos de tramitación, lo que confi- gura un escenario con poca flexibilidad en cuanto a la movilidad del recurso hídrico. En este aspecto, la Junta de Vigilancia del Río Grande y Limarí permite internamente el traslado de los puntos de extracción en el río, siempre y cuando no se afecten los derechos de agua de terceros. Algu- nos entrevistados mencionaron que, aun- que era un acuerdo interno e informal, la DGA estaba al tanto de que lo llevaban a cabo. Un elemento importante a desta-

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