Estudio de la gestión adaptativa en Chile: descubriendo elementos para la resiliencia
275 /328 HERRAMIENTAS INNOVADORAS integración de conocimientos basados en la investigación en la gestión del te- rritorio. También promueven la incorpo- ración de sistemas de conocimiento local en la toma de decisiones y garantizan la temprana integración del conocimiento y procesos locales en la planificación. La gobernanza costera adaptativa surge en respuesta a los constantes conflictos entre política, personas y naturaleza, co- munes en el contexto chileno. En los últimos años, Chile ha implemen- tado nuevas regulaciones y herramientas de planificación territorial que conside- ran el riesgo, como la Política Nacional de Desarrollo Urbano (PNDU) y los Pla- nes Regionales de Ordenamiento Terri- torial (PROT). Estos también incorporan las opiniones de la comunidad local. Sin embargo, estas herramientas a menudo no logran coordinar adecuadamente la gestión en las zonas costeras. Las re- gulaciones para la gestión costera en Chile, como el DFL N°340 (1960), la Po- lítica Nacional de Uso del Borde Costero (PNUBC) (1994) y el Decreto Ley N°1939 (1997), no están diseñadas para un or- denamiento profundo y carecen de me- canismos eficientes para la coordinación y colaboración entre las regulaciones y el socioecosistema costero. 8 En 2019, el Centro de Investigación para la Gestión Integrada del Riesgo de De- sastres (CIGIDEN) presentó una pro- puesta para una "nueva Ley de Costas en Chile." 9 Esta propuesta se basa en principios como la gestión integrada de zonas costeras, el desarrollo sostenible, el cambio climático, el reconocimiento de la naturaleza pública de las zonas cos- teras, la reducción del riesgo de desas- tres, la justicia ambiental, la participa- ción pública, el enfoque ecosistémico y el principio precautorio. Su objetivo es coordinar los diferentes instrumentos de planificación territorial, enfocándose en la sostenibilidad, la cooperación y la participación. Paralelamente, entidades encargadas de elaborar planes de emergencia, como la Oficina Nacional de Emergencia del Mi- nisterio del Interior y Seguridad Pública (ONEMI), y otras responsables de arti- cular diversos intereses y necesidades de la sociedad frente a desastres, como el Instituto para la Resiliencia frente al Desastre (ITREND), están estableciendo canales de comunicación y participación orientados a la preparación y respuesta comunitaria ante desastres, así como al fortalecimiento de la resiliencia. Estas iniciativas, lideradas por grupos educados e informados, pueden ser clave para superar las limitaciones actuales en la gestión del riesgo en Chile. Hasta ahora, la gestión del riesgo se ha centrado prin- 8• Castro et al., “Algunas Orientaciones para el Manejo Costero Integrado en Chile”; Martínez et al., “¿Por qué Chile necesita una ley de costas?” 9• Martínez et al., “Hacia una Ley de Costas en Chile: Criterios y Desafíos en un Contexto de Cambio Climático”.
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