Las organizaciones de la sociedad civil y la descentralización en Chile

8 Introduccción Tenemos historia, memoria, antecedentes y ejemplos importantes a mano, contribuyendo estas páginas a conectar el conocimiento experto con los desafíos todavía presentes y futuros que deberá resolver el país de forma sostenible más aún en un contexto de cambio climático y vulneración constante a la naturaleza y al medioambiente. centralizador, rol vinculante que ha sido, en muchos sentidos, una «asignatura pendiente» del esfuerzo de construcción de Gobiernos Regionales y Locales que refuercen la gobernabilidad democrática en el país. Es en los grandes territorios, donde residen los actuales Gobiernos Re- gionales, donde la articulación de estos actores sociales adquiere una dimensión esencial. Esos participantes, especialmente cuando logren coherencia, coordinación y estrategias comunes, se habrán de convertir en «factores de cambio» y en articuladores de nuevas acciones de polí- tica pública en cada territorio. En el municipio y/o el gobierno local estas entidades se desenvuelven en su «ámbito natural», gestionando y articulando la acción social, que contribuyen a la cohesión de las comunidades, y buscan nuevas formas de solución a problemas de larga data. Los instrumentos metodológi- cos de la planificación territorial como los Presupuestos Participativos surgen como una alternativa para que las comunidades expresen prio- ridades de trabajo e influyan en el accionar y la planificación de los gobiernos locales. No se pueden entender las políticas y programas más innovadores de acceso a la vivienda y a los servicios fundamentales del hábitat urbano sin esa participación y gestión ciudadana. La realidad actual de la problemática de abastecimiento de agua potable en localidades rurales no es posible de enfrentar sin la función de los Comités de Agua Potable Rural. El mundo empresarial y el mundo social asociados, constituyen una «unidad de propósitos» capaz de enfrentar desafíos de la mayor rele- vancia, tanto a escala local, provincial, regional y nacional, siendo la mejor versión de esta alianza, cuando se da en un ambiente de co- herencia, cohesión, acción inter-agencial pública coordinada y coope- ración adecuada entre los diferentes niveles de forma iterativa, donde los desafíos del crecimiento y el desarrollo se observan de manera más abordable. En consecuencia, en los tiempos actuales más que nunca, la descentralización deberá ser revitalizada mediante una gestión social activa y organizada. Donde se construyan fuertes alianzas público-so- ciales, del modo mismo en que se han articulado las asociaciones públi- co-privadas en el esfuerzo descentralizador.