Guía rápida de fotografía facial y de los maxilares en odontología

31 FOTOGRAFÍA DE LOS MAXILARES Durante el diagnóstico el registro del “antes” es fundamental para usted, es su tiempo cero. De hecho, recomiendo que, previo a cualquier atención odontológica, por poco invasiva que usted la considere, registre con fotografías el caso, tal y como llegó. Inclu- so antes de las impresiones de estudio. Aunque haya inflamación gingival, aumentos de volumen, caries, tártaro, etc. Luego, cuando resuelva estos problemas de salud generales y su caso esté listo para comenzar el tratamiento que usted haya planificado para su paciente, vuelva a tomar un set de fotografías intraorales que se- rán las “iniciales o previas” del caso que quiere documentar, pero sin descartar el registro anterior que será el tiempo cero, tal cual recibió usted a su paciente. Esto puede tener inclusive un valor legal y ser de utilidad en el futuro para su paciente y usted como su tratante. Por ejemplo, si usted recibe un paciente como segunda opinión, o debe resolver un problema de urgencia de un tratamiento que está complicado (ej; una impactación mucosa de una barra palatina de ortodoncia en el paladar, o una infección subprotésica por hongos, etc.) y no puede postergar intervenir o esperar a que su tratante lo resuelva. No tome las fotos después de que resolvió ese problema puntual, tómelas antes. Así dejará un registro de cómo llegó su paciente y no cuando ya hizo una intervención. Esto le permitirá a Ud. tener un respaldo visual del hecho previo a su tratamiento. De lo contra- rio solo tendrá un recuerdo descriptivo de lo que usted haya visto, sin ningún respaldo. Con una foto previa, tal cual usted recibió al paciente, podría enviarla a su colega y mostrar con más detalle que era lo que pasaba y que obligó a intervenir de urgencia.