Umbrales del Arte. Creación y Estímulo

Amanda Fuller 10 La Otredad individual y colectiva El Otro, el ser humano diferente, puede encontrarse como individuo y producir distintas formas de relación: amistad, hostilidad o indiferencia. Algo semejante se observa en los colectivos: comunidad, pueblo, nación, construcciones basadas en identidades comunes. Los colectivos humanos generan identidades que dan a sus miembros sentido de pertenencia y compartición de preferencias y aversiones. La identidad grupal puede basarse en historia compartida, lenguaje común, semejanza de atributos físicos, comunidad de creencias. También puede fundarse en un proyecto comunitario que proyecta los atributos percibidos al futuro. García Morente (1961), en su idea de la Hispanidad, formula la tesis de un "estilo" común. Cree encontrarlo, por ejemplo, en la imagen ideal típica del caballero español. Juan Valera y otros intelectuales decimonónicos creyeron encontrar claves para un "iberismo" que unificara a los pueblos peninsulares. Trátese de historia, creencia, apariencia, lenguaje o historia, las identidades grupales se expresan en mitos y símbolos . También en atributos, reales o imaginarios, que distinguen lo propio de lo ajeno. El Otro es algo ajeno, amenaza o provoca resistencia. Sólo el descubrimiento de alguna comunidad (de intereses, rasgos o esperanzas) pueden inducir la benevolencia y beneficencia que caracterizan a la amistad. La expresión de identidad grupal es diversa. Puede no coincidir con vivencias individuales, según las circunstancias. Conceptos como raza han perdido prestigio, si bien los atributos fenotípicos se invocan para rotulaciones: raza blanca, amarilla o negra, designaciones utilizadas en el período de expansión colonialista europea y aún presentes en el lenguaje cotidiano. La polémica que enfrentó a los sacerdotes Sepúlveda y Las Casas se centró en la condición de seres humanos de los indígenas de América (Lolas, 1985).