Situando territorios desde la interseccionalidad: terminos clave desde el sur

26 Fuentes Brah, A. (2006). Diferença, diversidade, diferenciação. Cadernos pagu 26:329- 376. Catrileo, D. (2019). Piñen. Libros del Pez Espiral: Santiago de Chile. Ejemplo DanielaCatrileo,escritorachilena,ensulibroPiñen(2019)describe en un género biográfico cómo al crecer fue notando las diferentes categorizacionesenque la familiay laescuela lahacíanencajar: “¿Qué era ser mujer? Resultaba normal esconder todo tras las acciones domésticas. Resultaba normal queme cuidaran en extremo en relación a mi hermano. Resultaba normal que a los 12 añosme estuvieran comprandomi primer sostén talla cero y que todos los chicos del pasaje se enteraran de que ya comenzaba a ser lo que temíamos: una mujer. Por ahí, ya no era apropiado subirme a los árboles ni jugar a las bolitas. Pues tenía que prepararme para la menarquia y ahí la cosa se ponía peligrosa. Todos articulaban los movimientos para hacerme una mujer. sin embargo, nunca me explicaron el porqué ni tampoco me preguntaron si yo quería hacerlo” (p. 55). “Lo de la categorización como diferentes empezó del siguiente modo. Al principio no advertimos por qué nos elegían para cosas específicas, como los actos del 12 de octubre o para fiestas patrias. Pues también nos estaban eligiendo para todo lo demás.Nosinscribíanencuantoactofueraposible aunque tan solo fuese sostenerles las flores a la virgenoqué sé yo […]. Creoque fuemás evidente cuando íbamos en cuarto básico. Tuvimos una profesora de historia reemplazante. Al pasar la lista, se detenía en cada apellidomapuche. el mío erael primero:Calfuqueo…” (p. 73). En estos relatos podemos evidenciar prácticas cotidianas que implican una marca, una diferenciación, que no es explicitada o explicada, pero que se expresa en consecuencias, oportunidades y señalamientos diferenciados.