Agresiones sexuales: reflexiones acerca de las intervenciones psicológicas [Volumen VII]

370 Agresiones Sexuales. Volumen VII . Elías Escaff Silva, María Isabel Salinas Chaud, Paula Flores Zúñiga y Carolina de la Fons Díaz Una conducta sexual sin consentimiento, involuntaria de una de las partes, a veces puede haber un tema de poder sobre el otro ya sea en edad, en tamaño político laboral en todo sentido que ejerce cierta presión sobre un otro más vulnerable. (Entrevista 1, comunicación personal) Se alude así a la relación de abuso de poder que se genera cuando una persona es víctima de una agresión sexual. De esta forma la terapia de grupo se inserta como un proceso psi- coterapéutico que permite elaborar y resignificar la experiencia abusi - va, siendo un tipo de intervención que suele ser llevarse a cabo de forma independiente, o paralela a un proceso de terapia individual, como un complemento en cuanto a facilitar una comprensión de sí mismo junto con un grupo de pares. Así también se enmarca desde un enfoque teó- rico, el cual, es propio de acuerdo al enfoque clínico técnico/personal al que adscribe cada terapeuta y/o institución en la cual se realiza la intervención. En relación con el modelo teórico o forma de abordaje, se encuen- tran dos formas de visualizar la intervención grupal, una desde el mode- lo traumatogénico de Finkelhor, y la otra desde las terapias narrativas. Ambas miradas coinciden en la importancia de considerar el modo en que NNJ vivencian de forma individual e irrepetible la experiencia de vulneración en la esfera de la sexualidad, considerando sus valores, ca- pacidades y recursos. Esto con el fin de fortalecer sus habilidades, más que centrarse en el problema o motivo de ingreso, es decir, considerarlo como parte de sus vivencias, pero no como un determinante represen- tativo de su historia vital y forma de enfrentar el mundo. Para llevar a cabo una adecuada intervención grupal, se debe con- siderar todos los factores a la base de la formación e interacción dentro del grupo, teniendo en cuenta las características de sus miembros de forma individual, estilos de relacionarse y la manera de enfrentar di- ficultades de forma conjunta. En este sentido se visualizan diferencias notorias entre ambas terapeutas. En específico, la primera entrevistada adscribe a un enfoque clínico basado en las terapias narrativas, a partir del cual se consideran los valores, creencias y habilidades de las per- sonas. Esto se hace a través de la contemplación de sus historias y del cómo, a través de las narrativas de sus experiencias, logran otorgar una