Miradas para el desarrollo del trabajo inter y transdisciplinario en América Latina

PARA EL DESARROLLO DEL TRABAJO INTER Y TRANSDISCIPLINARIO EN AMÉRICA LATINA MIRADAS las formas de institucionalización y, a la vez, sobre la rigidez que pue- den propiciar. Se plantea la necesidad de contar con una estructura que legitime y formalice el trabajo, pero que no lo haga más complejo. La reflexión se profundiza en relación con procesos de institucionaliza- ción desde su doble dimensión: lo instituido y lo instituyente. Si bien las disposiciones normativas, fondos y modalidades institucionales per- miten, en cierta medida, la promoción y el reconocimiento formal del trabajo, no necesariamente aseguran las condiciones requeridas para iniciativas de carácter MIT, pues dejan de lado aspectos particulares en campos como el diseño, ejecución y valoración. Con los avances actuales y desde la perspectiva de la institucionali- zación, se busca problematizar la experiencia y exponer algunos de los retos que se enfrentan como parte de las tensiones entre lo formal y no formal, lo instituido e instituyente o la necesidad de condiciones específicas para el diseño, implementación y valoración de la MIT. Lo anterior pasa, en mucho, por transformar las formas actuales del dise- ño institucional en relación con las iniciativas. Si bien existe un gran potencial para el trabajo MIT, el primer reto se relaciona con la normativa institucional actual de los PPAA, materiali- zada en el Reglamento para la Gestión de Programas, Proyectos y Ac- tividades Académicas en las Universidad Nacional (UNA, 2020), que es rígido, burocrático, verticalista y poco estimulante. Los procedimien- tos institucionales obstaculizan la ejecución de los trabajos MIT; por ejemplo, con las dificultades para gestionar iniciativas entre varias uni- dades académicas e integrar la participación estudiantil y comunitaria. Aunque las disposiciones políticas y normativas hacen referencia a la promoción del trabajo MIT, en la práctica se organizan con el mismo esquema del trabajo disciplinario, con los mismos parámetros de eva- luación y formatos de diseño. Ahora bien, a estas limitaciones se debe encontrarles una respuesta. Además, no son únicas de la UNA, sino compartidas por otras experiencias de institucionalización expuestas por Villa et al. (2016), Hidalgo (2016) y Vasen y Vienni (2017). El segundo reto es la identificación y superación de las barreras de comunicación que existen entre los múltiples actores que dan senti- do al trabajo académico; por ejemplo, entre pares académicos, entre académicos y las personas asesoras de las vicerrectorías académicas, entre personas administrativas y académicas, así como también entre la academia y la comunidad nacional. Se requiere solventar las limita- 172 Capítulo 3

RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=