Transformar la educación. Entrevistas que muestran caminos

68 TRANSFORMAR LA EDUCACIÓN. ENTREVISTAS QUE MUESTRAN CAMINOS Creo el gran vacío es la brecha entre lo que dicen las políticas y lo que pasa en la realidad, la po- lítica tiene que entrar con la realidad, porque sin las dos cosas no vamos a tener éxito. Y también se necesitan recursos, el modelo social de discapacidad no es no es barato y para armarlo se necesitan recursos humanos, materiales y eso cuesta. No hay forma de decir que ello no es así. Si los recursos son tan fundamentales, ¿qué pueden hacer los sistemas educativos de países que no son ricos? ¿Hay que tener menores expectativas? Yo creo que hay muchas cosas que sí se pueden hacer y que he visto, las que dependen un poco m s de lo que hagan las escuelas, de lo que decida su equipo directivo, de la experiencia que tengan con niños con discapacidad y de cómo definen el concepto de inclusión. Siguien - do con el ejemplo de Bolivia, me he encontrado varias personas que sí estaban con toda la voluntad de hacer y que adem s estaban capacitando a sus profesores para usar técnicas y trabajando con padres de familia también para incluir a los ni os, quiz s dos horas por por día en la escuela, quiz s no todo el día. Yo diría que los avances en Bolivia no han sido tanto por la economía ni la política, aunque haya dicho que iba incluir a todos. Hay barreras estructurales que se pueden arreglar f cilmente. Por ejemplo, si un ni o que tenía silla de ruedas no podía llegar a la escuela, a veces necesita poco, por ejemplo, una rampa que sube o asegurar que el aula de los ni os esté en la planta baja. Pero también hay otro tipo de respuestas: si un ni o no puede subir las escalas, entonces lo llevan. Aquí [en Gran Breta a] hay reglamentos de salud y seguridad que nos tienen rodeados, por lo que nadie haría eso aquí, porque no está permitido. En otros lugares hay más flexibilidad para usar el sentido común, de forma de proteger el concepto de inclusi n para los ni os con discapacidad. También se requiere del trabajo de los profesores y la direcci n de la escuela, porque puede ser que un ni o haya tenido un buen a o con una profesora en un aula y que al a o siguiente no contin e esa trayectoria, porque el profesor que le toc , tiene miedo de trabajar con ni os con discapacidad. Un profesor de Noruega me dijo uno de los grandes temas respecto de la discapacidad que frenan a la inclusi n y la comunicaci n natural, es el miedo. Si pudiéramos sacarnos el miedo de hablar, de comunicarnos, de interactuar con personas con discapacidad severa, realmente podríamos incluirles m s. Algunos profesores no sienten que tienen la capa- cidad, no tienen la confianza personal para “lanzarse” a educar a un niño en su situación. Entonces creo que sí hay formas, la inclusi n es algo en que todos podemos colaborar. Usted ha dicho que, además de la voluntad e interés activo es necesario desarrollar conocimiento técnico para la enseñanza de niños con discapacidad. ¿Qué se requiere para ello? Me gustaría ver m s m dulos en formaci n inicial para profesores que traten de estas técni- cas, que tengan un módulo que se enfoque en cómo incluir niños, pero no sólo la filosofía o el concepto, sino el qué hago con este ni o o ni a. Por ejemplo, aquí tenemos la meta curricular de que un ni o de 5 a os tiene que estar leyendo tal y tal, hasta no sé qué edad, pero ¿c mo hacemos para traducir esta meta para ni os con estas características? Hay formas de hacerlo, por ejemplo, una meta puede dividirse en diez pasos para lograrla. Con ello un docente puede decir “ah, entonces lo que tengo que ense ar a este ni o es, por ejemplo, lograr que el revise un libro con dibujos, o llenar la ltima palabra de las p ginas este libro” y eso para él va a su meta para avanzar en el currículum del a o. Si los profesores no tienen la libertad y el conocimiento de c mo manejar el currículo regular y traducirlo para un ni o de cierta edad y de ciertas habilidades, tenemos que darles las he- rramientas para hacer eso. No podemos esperarles a que hagan eso naturalmente, algunos