Orientaciones didácticas para una educación científica no sexista

El lenguaje es un sistema arbitrario de signos que permite la comunicación entre los seres humanos, es convencional y arbitrario a la vez, así como también posee un lado social e individual, es multiforme y heteróclito (Saussure, 1955). La lengua, es un producto social y, a la vez, un conjunto de convenciones necesarias adoptadas por la sociedad que permite la posibilidad de comunicarnos. Se concibe como un sistema histórico y compartido por una comunidad lingüística para representar la realidad social, para establecer relaciones sociales y para construir discursos en distintos contextos (Charaudeau y Maingueneau, 2005). Para lo anterior la lengua establece normas y, a medida que desarrollamos la capacidad de comunicarnos, comenzamos a establecer y aprender categorías: observamos e interpretamos la realidad a través del tamiz de la lengua, la cual influencia la forma en que conceptualizamos y memorizamos la realidad. Ejemplo: Si yo pienso (categorizo) que los niños deben ser valientes, al momento de ver a un niño llorar voy a enunciar “los niños no lloran” o “llorar es de niñas”. Lo cual puede producir un efecto de angustia y vergüenza en el niño que esté en una situación como esa. 1. Lengua y género Los estudios de lengua y género se ocupan de explorar el papel que desempeña el lenguaje a la hora de reproducir desigualdades basadas en el sexo o identidad de género de las personas, no marcadas por la biología. Como hemos dicho, la lengua es eminentemente social y uno de los mecanismos que nos permiten expresar nuestras ideas y pensamientos, nuestra forma de ver y estar en el mundo que LENGUAJE, LENGUA, GÉNERO Y CULTURA Orientaciones didácticas para una educación científica no sexista 3

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