Nosotras investigadoras: estrategias con perspectiva de género para la inserción y el desarrollo de y la investigación universitaria. Sistematización de la experiencia. 2022, primera versión

Nosotras Investigadoras: Estrategias con perspectiva de género para la inserción y el desarrollo de y en la investigación universitaria. Sistematización de la experiencia. 2022, primera versión. • 24 InES Género UCH | Vicerrectoría de Investigación y Desarrollo “Mi mayor dificultad en este camino ha sido creerme el cuento. Hoy, a mis 33 años, puedo decir con orgullo “soy buena en lo que hago””. “Esto, pues a pesar de haber estudiado una carrera feminizada, en una U cuyo estudiantado es mayoritariamente femenino y haber ejercido en escuelas, donde la mayoría del profesorado son mujeres, tuve que leer sobre la feminización de la docencia para ver a mis compañeras/colegas y he ahí el principal sesgo de género que he vivenciado en mi área de conocimiento: la invisibilización de las mujeres en el sistema educativo”. “Mi experiencia en España me entregó probablemente el sesgo de género más dramático que he vivido como investigadora (…) Una clase magistral realizada por el director del programa se trató sobre un recorrido histórico sobre las teorías literarias. Cuando el profesor, varón por supuesto, llega a los estudios culturales y de género, señala que esas no son teorías literarias ni que pueden ni deben aplicarse a un análisis literario porque tenían intereses ideológicos”. “Muchas de las ramas de la ingeniería mantienen sesgos de género en su diseño, en sus decisiones, probablemente impulsado por el androcentrismo. Desde la ruta que toma el transporte público, al diseño de los cinturones de seguridad, hasta el metabolismo basal que se considera para regular el acondicionamiento térmico de una pieza”. “También existe una romanización e infantilización el investigar temas de género, caracterizándolos como “estudios bonitos” o “estudios con poco impacto”, comentarios que, lamentablemente, han salido de la boca de investigadores del género masculino. El cómo abordar estos sesgos es un desafío diario, pues implica poner sobre la mesa la real importancia de invertir y promover el estudio profundo de la violencia hacia la mujer”.

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