Comunicación, política y sociedad. Estudios y reflexiones contemporáneas
Salvador Percastre-Mendizábal 181 universitarios, lo que a su vez ha modificado su práctica ciudadana, contradictoria- mente, también reconocen que no se involucran de manera “activa” en organizaciones de representación ciudadana, política o estudiantil en una proporción altamente significativa. Esto señala que, al parecer, el convencimiento de los estudiantes de ser mejores ciudadanos y mejorar su práctica ciudadana, procede del nivel de abstracción conceptual construido acerca de la ciudadanía, sin necesariamente tener incidencia directa en el ejercicio o accionar ciudadano de los estudiantes. Tabla 4. ¿Participas en alguna asociación política o ciudadana juvenil? (n=742). Frecuencia Porcentaje Sí 123 16.6 No 619 83.4 Total 742 100 Fuente: Elaboración propia. Tabla 5. ¿Has participado en algún comité estudiantil de tu Facultad? (n=742). Frecuencia Porcentaje Sí 98 13.2 No 644 86.8 Total 742 100 Fuente: Elaboración propia. Estos son descubrimientos interesantes porque ponen en perspectiva uno de los pergeños sustanciales de la ciudadanía, la cual se construye en el ejercicio y tiene lugar en la práctica de las acciones de los ciudadanos (Santillán y Viloria, 2014), por tanto, comprensible en la participación pública proyectada en la intervención de las decisiones políticas, son hitos que se practican en la vida social, económica, política y cultural de una comunidad (Marshall y Bottomore, 1998). Ahora bien, la Tabla 6 muestra información adicional que constata lo inferido hasta el momento, ya que los estudiantes expresan que, además de no participar o haber participado en comités ciudadanos, políticos o estudiantiles, no les resulta atractivo, particularmente, participar en organismos de representación estudiantil como son
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