Informe país: estado el medio ambiente y del patrimonio natural

INFORME PAÍS SOBRE EL ESTADO DEL MEDIO AMBIENTE 2019-2022 SEGUNDA PARTE: Estado del medio ambiente y del patrimonio natural 28 disposición por parte de los usuarios a permitir el embarque de observadores científicos. Con ello, no se puede establecer el estado de situación de este recurso, aunque se estima que se encuentra sobreexplotado o agotado. El análisis del recurso langostino amarillo ( Cervimunida johni ) lo clasifica en un estado de subexplotación y sin sobrepesca, con una tendencia sostenida al aumento en los estimados de biomasa desovante y total desde el año 2011. El mismo patrón se ha evidenciado en el caso del langostino colorado ( Pleuroncodes monodon ) en cuanto a las estimaciones de biomasa. En esta especie, la mortalidad por pesca y el reclutamiento se han mantenido estables con el paso del tiempo. Así, se le categoriza en plena explotación y sin sobrepesca. De forma similar a la evaluación del estado de situación de los langostinos, el camarón nailon ( Heterocarpus reedi ) presenta estimados de biomasa total estable y un aumento en la biomasa desovante entre los años 2019 – 2021. Además, la mortalidad por pesca se caracteriza por tener niveles reducidos. Con dichos antecedentes se estima que este recurso se encuentra subexplotado en las zonas centro-norte y centro-sur. El estudio de la pesquería del recurso anchoveta ( Engraulis ringens ) se realiza considerando tres unidades de pesquería (Arica y Parinacota a Antofagasta, Atacama y Coquimbo, Valparaíso a Los Lagos). Tomando en cuenta antecedentes ambientales, evaluaciones de stock, estudios basados en modelación y la estructura de tallas, entre otros, el comité científico técnico a cargo define que el estado de la anchoveta en su unidad de pesquería norte se encuentra subexplotado. En tanto que las unidades centro-norte y centro-sur se califican en un estado de plena explotación. El recurso sardina española ( Sardinops sagax ) mantiene su presencia representada en la forma de capturas incipientes en los registros de desembarque. Durante los años 2018, 2019 y 2021 dichos valores bordearon las 1.500 toneladas, en tanto que el 2020, se alcanzó un estimado de 3.547 t. Como se ha reportado en años anteriores, no se cuenta con los antecedentes necesarios para poder estimar un marco biológico de referencia, con lo cual no se puede efectuar una evaluación del stock de este recurso. Así, se mantiene el estado de agotamiento o colapso para definir su estado pesquero. Al respecto se postula que la influencia de condiciones ambientales, físicas y biológicas no habrían sido favorables para su desarrollo.