Innovación social y pública: experiencias y aproximaciones a la complejidad contemporánea

CAPÍTULO I. El desafío de lo público 97 Experiencias y aproximaciones a la complejidad contemporánea INNOVACIÓN SOCIAL y PÚBLICA dos, aunque a veces podemos acercarnos a ellos intelectualmente” (1978:05). En particular, dejar el utilitarismo como única medida de valor y la lógica del incentivo económico para la resolución de todos los posibles problemas de la sociedad, parece correcto. Sin embargo, carecemos de un marco teórico transversal para (re)definir valor (Heinich, 2020), y, por lo tanto, no logramos canalizar ninguna transformación real o innovación relevante fuera de los límites del actual sistema. Este, en su naturaleza de canalizador de intereses económicos, en el mejor de los casos solo nos permite redistribuir una cierta cantidad de utilidad con perspectiva individual. Solo como ejemplo, antes de establecer su teoría del capital en Das Kapital (1867), Karl Marx nos provee en el libro I, tomo I, capítulo I de un marco de referencia para la conceptualización del valor (correcto o incorrecto, al menos existe, y existe antes de levantar una teoría). Lo mismo ocurría con Weber en Wirtschaft und Gesellschaft. Grundriß der verstehenden Soziologie (Economía y Sociedad) y cualquier otro científico respetable. En la economía actual esto sigue descansando sobre los axiomas y supuestos que terminan reduciendo todo al valor del precio (y/o utilidad) (Mazzucato, 2018; Barber, 2021; citado en Connolly y van der Zwet, 2021:6). Cabe señalar, que dichos axiomas y supuestos ya fueron descartados como verdades científicas desde la perspectiva del comportamiento humano y la naturaleza de la racionalidad (Kahneman, 2011). Hoy, donde se cuestiona el uso hegemónico del valor económico, ex- traña entonces que comencemos con una mirada “desde cero”, con por ejemplo “pilares del valor público” (Barber, 2021; citado en Connolly y van der Zwet, 2021: 11) o con triángulos virtuosos de generación de valor (Moore, 1995), en condiciones de que la filosofía y la sociología (en particular la pragmática) nos pueden proveer (aunque aún no transversalmente) de basta conceptualización de valor y valoración. En el caso de innovación social (dentro o fuera del sistema público) podría ser adecuado el uso de valor social (Haase, 2021) el cual también se separa del valor económico, o más específicamente, lo incorpora de manera no dicotómica. Haase, por ejemplo, explora la cocreación de valor social, la cual tiene limitaciones determinadas por quien hace los juicios, quien los eva- lúa y quien recibe los beneficios. Es, entonces, altamente complejo realmente cocrear valor social, aunque justifiquemos nuestras acciones en la existencia de un beneficiario.

RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=