Innovación social y pública: experiencias y aproximaciones a la complejidad contemporánea
CAPÍTULO VIII. Innovación socio-tecnológica Experiencias y aproximaciones a la complejidad contemporánea INNOVACIÓN SOCIAL y PÚBLICA 768 El Fondo Monetario Internacional, el Banco Interamericano de De- sarrollo y el Banco Mundial reaccionaron negativamente a la adopción del bitcoin como moneda en El Salvador, aduciendo que ello no contribuiría a solucionar los problemas económicos del país (CNN, 2021); y las críticas al uso de fondos públicos para adquirir tales activos a precios peak de la época, como a las medidas de implementación anexas 14 , arrecian un año después contra el gobierno del presidente Nayib Bukele. En efecto, el precio del bitcoin ha caído 61% desde septiembre de 2021 y quienes entonces compraron alentados por la medida gubernativa hoy registran pérdidas. Sin embargo, el actual desplome en la cotización de las criptomonedas es un fenómeno global, ajeno al control del gobierno salvadoreño; aún más, las pérdidas por USD$50 millones ocasionados al erario salvadoreño no suponen un riesgo real a la estabilidad financiera de un país para cuyo PIB representan solo un 0.2% 15 . Por supuesto, sus detractores estiman el costo total de la aven- tura bitcoin en una suma que ronda los USD$300 millones, incluidos fondos asociados al proceso legislativo, financiamiento de los bonos Chivo y la referida pérdida en trading. El caso de El Salvador es único no solo por tratarse de la primera inte- gración de una criptomoneda al sistema financiero tradicional ; sino, además, por generar infraestructura normativa para una serie de servicios asociados (cajeros automáticos, software, aplicaciones móviles, registro contable, etc.) y que requiere su implementación. En otras latitudes, la República Popular China no se queda atrás y en septiembre de 2021, por primera vez, declaró ilegales todas las transacciones con criptomonedas. Lo que demuestra que, al menos para China, ciertas ac- tividades económicas digitales suponen riesgos de entidad para sus políticas 14. Como la provisión, lectura y validación de códigos QR y el uso de la app para teléfonos inteligentes “Chivo” para efectuar transacciones en bitcoin, convirtiendo USD a Bitcoin y viceversa, con tarifas de pro- cesamiento ínfimas; o usando los cajeros automáticos especiales “Chivo” para retirar USD de sus billeteras digitales de Bitcoin y/o hacer transferencias internacionales. La app del gobierno no ha estado exenta de ácidas críticas por su funcionamiento; y se esperaba que fuera mejorada con la intervención tecnológica de desarrolladores de software de Chicago, tales como Athena Bitcoin Global y Accruvia; finalmente, AlphaPoint Corp., una compañía de Nueva York ha podido hacerla funcionar mejor y conmayor seguridad. 15. El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, ha dicho que su país es “(…) el epicentro de la adopción del bitcoin, y por ende de la libertad económica, la soberanía financiera, la resistencia a la censura, la riqueza no confiscable y el fin de los coronadores de reyes, sus publicaciones, devaluaciones y la reasignación de la riqueza de las mayorías hacia los intereses privados, las élites, los oligarcas y los poderes en las sombras detrás de ellos, moviendo los hilos” (Bitcoin Magazine, 2022).
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