Innovación social y pública: experiencias y aproximaciones a la complejidad contemporánea
CAPÍTULO II. Colaboración y confianza como base de la Innovación 201 Experiencias y aproximaciones a la complejidad contemporánea INNOVACIÓN SOCIAL y PÚBLICA Introducción El desarrollo de los sistemas de innovación facilita la integración de diferentes actores dentro de los procesos de innovación. El modelo de Triple Hélice, por ejemplo (Etzkowitz y Leydesdorff, 2000), vincula al Gobierno, la Industria y la Universidad en diferentes dimensiones de participación, pro- poniendo al gobierno como mediador de la relación universidad-industria, siendo un articulador dentro los mecanismos de colaboración y desarrollo de capacidades. No obstante, los objetivos de la colaboración pueden presentar visiones muy diferentes entre sí, demostrando que, si bien los actores pueden estar de acuerdo en enfrentar problemas concretos, persiguen sus propios intereses (Dankbaar, 2019). Dentro de los sistemas de innovación, además, se han integrado nue- vos actores como lo son la sociedad civil y el medioambiente en sistemas de cuádruple y quíntuple hélice, respectivamente (Carayannis et al., 2021), siendo relevantes en las relaciones de triple-hélice (Cai y Etzkowitz, 2020). La socie- dad civil se presenta como cocreadora en la búsqueda del bienestar social y el medioambiente, desde la comprensión de que las soluciones ejercen un im- pacto sobre el entorno de la sociedad y la economía (Carayannis et al., 2020), añadiendo nuevos puntos de interacción en la búsqueda del bienestar social y ambiental del propósito de generar innovación (Carayannis et al., 2014). Este contexto lleva a medios para obtener una ventaja competitiva; no obstante, se requiere un sólido desarrollo de capacidades, así como la capacidad de orquestar activos y recursos intangibles de forma eficiente (Lessard et al., 2016), dando énfasis al desarrollo y la creación de oportunidades, ya que, no solo la mera innovación es una garantía de éxito en el rendimiento respecto a determinados mercados (Lee et al., 2010), y donde las organizaciones de- ben saber reconocer y dar forma a los acontecimientos que interpretan como oportunidades (Teece, 2007), lo que permite aprovechar las ventajas existentes mediante la disminución de la resistencia al cambio, fomentando un ambiente de cooperación que permita a la empresa invertir en nuevas habilidades y ac- tivos en el desarrollo de nuevos modelos de negocio (Helfat y Peteraf, 2015). El desarrollo de capacidades dinámicas orientadas en la colaboración encuentran un ámbito práctico de aplicación, como lente para analizar el im- pacto que tiene sobre el rendimiento de la empresa y los comportamientos que pueden darse en torno a la reconfiguración, renovación y explotación conti-
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