Huella y presencia (tomo VII)

II UELLA \' PRESENCIA VII pude recordar un a ecuac1on que tenía que aplicar para resolver uno de los pro- blemas planteados, y fue uno de los Pro- fesores examinadores, e l Dr. He rmann Niemeyer, quien me la "sopló" y pude sa- lir airosa del exame n. Luego fui in terro- gada sobre dive rsas materias de Química por e l Dr. J osé Ca lvo y e l Dr. J orge Goeminne, siendo fina lmente selecciona- da pa ra el cargo, y asignada a trabaj ar en e l grupo que d ir igía Niemeyer y que esta- ba integrado además por el Dr. Enrique Dra. Carmen Gonzá/,ez z. Figueroa y varios alumnos tesistas. El Insti tuto de Química Fisiológica y Patológica estaba dirigido o fi cialmente por e l Prof. Dr. Eduardo Cruz- Coke y lo in tegraban los grupos encabezados por los Drs.Julio Cabe- llo , He rma nn Niemeyer, Ma ri o Plaza de los Reyes, J osé Calvo, Florencio Fuenzalida, quienes tenían jornadas parciales en e l Insti- tuto y que al ai°10 siguiente, de acuerdo con la Ley Médica que co- menzaba a regir, tuvieron q ue decidir el tener jornada completa e incluso dedicación exclusiva, o bien abandonar la Universidad. Es así como a lgunos de e llos optaron por d ejar la p rácti ca clínica y dedicarse a la Bioquímica. Otros jóvenes fue ron incorporándose al Institu to. Entre ellos esta- ban J asna Rad~jkovic, Carlos Basilio y Alfonso Coronado . Todos e ramos j óvenes, unos más que otros, deseosos de aprende r, de hacer cosas, de realizar investigación cie n tífica, de formarnos en una disci- plina que en Chile aún no existía como carrera profesiona l. Era fasc inante estudia r a la par con aquellos que e ran ya "Profeso- res". Dedicábamos la hora de colación y las tardes sabatinas a nues- tros estudios. Usábamos los textos clásicos de Bioquímica de esos a11os, como e l "FrulOn", el "White", el "West y Todd". También nos prepará- bamos en Matemáticas y otras disciplinas, aprovechando la buena voluntad de algunos amigos que venían a ense1 arnos. Se estableció así una místi ca que nos unía , que nos hacía sacrifi car nuestras horas libres... y esto se lo debíamos a la dedicación y entrega a la docencia que siempre demostró especialmente el Prof. 1 iemeyer, actuando como e l ferme nto cata lizador de l grupo . En 1955, los jóvenes comenzamos a participar en la docencia. Las clases teóricas las impartían los Profesores y nosotros, los Ayudan tes 154