Huella y presencia (tomo VI)

Juuo Q UEZADA MELLA ciales. Fue así como el 1 de diciembre de 1995 se hace la asignación de 254 sitios de la Inmobiliaria Los Vilos Ltda., con la presencia del señor Director del hospital, doctor Emilio Morales, y el Notario Pú- blico don Gastón Santibáñez. Muy pronto se cerraron los terrenos y se urbanizaron (alcantarillado y electricidad); posteriormente se con- siguió un banco para prestar los dineros que se necesitaban para la compra de una cabaña tipo de 36 m 2 , más o menos. Actualmente el 80 por ciento de los propietarios goza en cualquier época del año de sus derechos adquiridos en la Sociedad. Desde e l año 1991 ocupo el cargo de Coordinador Administrati- vo y Encargado de Docencia en e l Departamento de Fisiología, el que se destaca por e l alto compromiso en la docencia de pregrado de la Facultad de Medicina, llegando a enseñar a más de 1.200 alum- nos por año. Este equipo de docencia llegó a ser modelo en la Fa- cultad de Medicina por su espíritu innovador, unido al gran com- promiso y responsabilidad de cada uno de los funcionarios. Sin em- bargo, no basta sólo reconocer el trabajo en su contexto general, sino que es necesario fortalecer e l liderazgo de la Facultad ante otras universidades. Es cierto qué en estos tiempos la competencia existe a todo nivel en diferentes ámbitos, pero es fundamental la necesidad de que nuestra facultad llegue a crear un sistema moder- no para hacer más eficiente la comunicación con los alumnos. En 1997 fue creado e l Instituto de Ciencias Biomédicas "ICBM", con el propósito de integrar las actividades académicas de las áreas básicas y preclínicas. Además, se crea la oficina de Apoyo Docente cuya misión es centrar en ésta la carrera de Medicina; por lo tanto, nuestra Oficina de Docencia queda con menos carga docente, tras- ladándose las asignaturas de Física, primer año, y Fisiología, segun- do año, a Medicina. Desde este momento el departamento de Fisio- logía y Biofísica pasa a llamarse Instituto de Ciencias Biomédicas, Programa de Fisiología y Biofísica. Hablar del laboratorio de trabajos prácticos autovalentes es hablar de la inquietud del Dr. Bruno Günther, quien siempre tuvo la espe- ranza de contar con modernos box, era su sueño anhelado. Recuerdo que hace algunos años me comenzó hablar de este sueño. El zócalo del pabellón G de Fisiología estaba en obra gruesa, sin terminar su construcción, y por no contar con espacio físico inten- tó ubicarse allí para montar algunas salas o box donde los estudiantes tuvieran montado, en forma permanente, algunos equipos para reali- zar experimentos de fisiología en los modelos habituales que usa la 211