Huella y presencia (tomo VI)

HUELLA Y PRESENCIA VI el actuar y el senúr de la comunidad académica. Es posible encon- trar tesúmonios extremos: la eliminación de los anúguos espacios de parúcipación que legiúmaban la academia parúcipaúva. Por otra parte, ha sido evidente el menoscabo de la comunidad académica nacional que ha debido enriquecerse con colegas que desarrollaron gran parte de sus vidas en universidades extranjeras, pero este he- cho no permite aceptar que se sientan los salvadores de la academia con sus importantes contribuciones científicas. ¡Qué difícil se hace la convivencia en casa e internacionalmente cuando la humildad es esquiva! En la competiúva sociedad actual todo está pemiiúdo, mu- chos luchan por mantener el poder, cuando lo más importante es mantener y acrecentar la autoridad. Las grandes potencias no úenen interés en acrecentar su autori- dad sino que sólo con el empleo de las armas intentan acrecentar el poder para aplastar naciones' completas en pro de la defensa de. lo que ellos creen tener: "democracia". El once de sepúembre del 2001', con el ataque a las torres gemelas en el centro de NuevaYork, solo ha hecho más explícito este conflicto. Autoridad versus poder Todo grupo social, y en especial sus líderes, en forma permanen- te deben hacer buen uso de esta combinación. Cuando la autoridad es ejercida con humildad no es necesario emplear el poder. Ejer- ciendo el poder no nos es posible observar la realidad completa. Se úene solo una parte de la realidad; qué saludable es escuchar a otras personas que piensan diferente a nosotros. Cada cual se enriquece, quien úene la claridad de manifestar sus puntos de vista como aquel que siendo más poderoso sabe escuchar. Cuando una persona que debe ejercer un cargo de importancia escucha a otros miembros de la comunidad universitaria, implícitamente ejercita la autoridad. Incrementando los espacios de conversación, se permite mante- ner y enriquecer la participación, pero no solo eso, sino que las insú- tuciones se fortalecen cuando los organismos colegiados funcionan, y no se transforman en un ente verúcal de recepción de señales "órde- nes". El mayor logro institucional de nuestra universidad ha sido el que, a pesar de las circunstancias, ha permiúdo el diálogo. Nos en- gañamos cuando se escucha, pero ustedes ya tuvieron la oportuni- dad de enriquecer el proyecto insútucional, cuando quien debía escuchar no tuvo la,capacidad de hacerlo. El conflicto de nuestra académica se puede haber acrecentado 168