Huella y presencia (tomo V)
Dra. Verónica CaeteP Facultad. IIUl:1,1_>\ Y PRESE1'CIA V Prevenir y/o manejar problemas d e salud e n los participantes, en especial conductas d e riesgo, psicopa to logía y problemas sociales. Facilitar la transición sa ludable d e aquellos que no queden seleccionados hacia otras áreas de su interés. Ello se r ea li za mediante entre n ami e nto grupal e n habilidades para la vida (taller ), tuto- ría individual y consejería vocacional. Los que necesitan también reciben coll.6ejería e n con- d uctas de riesgo (sexualidad, drogas, etc.), a ten- ción psicológica, psiquiátrica y/o social , y refe- rencia expedi ta a o tros centros. Estas activida- des se con centran en los dos primeros a11os d e Programa, previo al ingreso de los jóvenes a la Sus resultados han sido hasta el momento muy satisfactorios, destacando que los participantes pe rciben que aumentan su autoestima, habilidades de comunicación, capacidad de resolución de problemas y manejo de las emo- ciones, y los ayudan a enfrentar mejor los conflictos que p resen tan a lo lar- go de la Beca . También , que les permiten una mejor definición vocacional, buscar otras opcion es satisfactorias de educación superior en caso d e no ingresar a la Facultad y solucionar sus problemas d e salud. "En las sesiones nos ense11aron cuestiones mucho más valiosas que las típicas, como a relacionarnos realmente bien con los demás -algo que e ra mi lado débil- , a valorarnos con nuestros de fectos y virtudes, a aclararnos con nuestros proyectos de vida ... En verdad me ayudaron mucho. Fue una experiencia bacán ." (Andrés, generación 200 l). Por último, deseo por sobre todo destacar el gran valor que dan estos j óven es al co1-Dunto de actividades de la Beca Diego Peralta, tanto académi- cas, como psicosociales y comunitarias. Más allá de los beneficios espec íficos que les puedan gen era1\ visualizan estas expe riencias como un a porte muy significativo para su desarrollo personal. Ese es nuestro gran triunfo. "Aunque no haya quedado en la Facultad , no importa, la vida sigue... Pero lo que viví y aprendí e n estos meses nadie lo borrará de mi memor ia ni d e mi corazón. Me alegro sinceramente por los que quedaron. Ellos tienen dedos para el piano y sé que saldrán ad elante, y van a ser verdaderos profesionales. Pe ro más que nada, gracias. Muchas gracias a los que hicieron posible tocio esto, ya que demostra ron que hay pe rsonas a las que les preocupa nues- tro futuro, el de los j óvenes de hogares humildes pero que se la pueden en este país." (Carolina, gen eración 2001) . ()')
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