Huella y presencia (tomo V)

DR. TITO U RETA versitaria con la energía y entusiasmo que é l les había instilado con su ejemplo. Para él, sus mayo res premios fueron los logros de sus alumnos. EPÍLOGO Muy brusca·mente supimos que la salud de Niemeyer estaba seriame nte amenazada. En la ceremonia de entrega de la MedallaJuvenal He rnández, a fines de 1990, nos dimos cuenta que algo andaba mal pero lo atribuimos a un episodio de la hipertensión arterial que lo aqu~jaba desde hacía varios años. Muy poco_después me llamó para con tarme que el diagnóstico de los médicos era preocupante y que d e bería somelerse a una operación de cui- dado. Después de la inlervención q11irúrgica comenzó el lento declive que lo conduciría a su deceso e l 7 dej 11n io de 1991. La Sociedad de Bioquímica de Chile inviló en 1992 a varios asociados, alumnos y amigos a contar su relació n con He rmann. El volumen publicado (5) es fascinante po rque muestra d esde muchos ángulos las múltiples facetas de su personalidad y la influencia indeleble que ejerció sobre todos los que le conocieron. Al mismo tiempo, la Sociedad de Bioquímica instituyó e l Pre- mio Anual Medalla He rmann Niemeyer a l mejor resista e n el área d e la Bioquímica. Por su parte, la Sociedad de Biología de Chile lo recu erda cada año e n su Reunión Anual, e n la forma de la Confe re ncia Plenaria Hermann Niemeyer a cargo de un distinguido investigador chileno o extranjero. Esta semblanza h a sido una pintura con pinceladas gruesas y en todo caso inconclusa. La influe ncia de Niemeyer e n varias generaciones de estu- diantes es demasiado grande porque su personalidad era descomunal. Sus muchas facetas d eberán ser modelos para pintores más apropiados. Te rmino dedicando estas líneas a Man\j a Marich de Niemeyer quien supo manej ar a Hermann y a sus tres h ijos (larea nada fácil) y organizar el am- biente apropiado para que Hermann pudiera realizar todas las tareas que se impuso. Los logros de Niemeyer surgieron por cieno de su clara inteligen- cia, de su coraje inte lectual y de su intenso espíritu de trabajo. Pero Man\ja supo entregarle las condiciones para que Hcnnann pudiera dedicarse sin preocupaciones mayores a lo que le gustaba. Todos los asociados de Niemeyer pudimos aquilatar el talento de Man\ja para manejar a su familia (todos de genio ligero) con gran serenidad p ero, al mismo tiempo, con una capacidad excepcional para no dejar lugar a eludas acerca de su propio pensamiento. 4 1

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