Huella y presencia (tomo II)

HUELLA YPRESENCIA hay un movimiento mundial que reconoce la necesidad de la especialidad, lo que crece en forma sostenida en Europa, EE.UU. y algunos países de Latino- américa. Veo un futuro positivo con vicisitudes en e l camino de la salud fami liar, pero tengo confianza que el espíritu de servicio y de solidaridad de las partes comprometidas: Universidades, Ministerio de Salud y los nuevos especialistas van a consolidar e l desarrollo sustentable para esta especialidad. Como las actividades del eje rcicio de la Medicina General Familiar requie- ren del trabajo en equipo, parece indispensable la necesidad de capacitar en esta especialidad a otras carreras de la salud, por lo tanto la Escuela de Postgrado debiera incluir en un futuro cercano por lo menos las becas de especialización para enfermeras y matronas para consolidar el equipo en Salud. Otro cambio importante derivado de todo e l proceso de- formación de Especialistas de Medicina General Familiar es su repercusión en la enseñanza d e Pregrado, que en el nuevo currículum de la Escue la de Medicina significa mayor tiempo para la enseñanza ambulatoria en consultorios de Atención Primaria a nivel Urbano y Rural, no sólo a nivel del inte rnado sino también en 3cr y 4° año de la carrera. El departamento de Medicina Preventiva y Comunitaria tiene un papel fundamental en la coordinación y en la progra- mación a realizar en los niveles antes mencionados en toda la facultad. Se están dando ya los primeros pasos con el Departamento de Medicina con el Hospital J osé Joaquín Aguirre en e l 2º semestre de 1998. La carrera de Obstetricia ha incluido desde hace 2 años una unidad de Salud Familiar para las a lumnas de 3cr año y esperamos que otras carreras sigan esta senda. El d esafío es grande y esperamos vencer las dificultades y hacer una colaboración substancial a la mejoría de los servicios otorgados a la población a nivel primario de Salud. 126

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