Cabildos filosóficos

-97- Sentidos del Futuro y usos de las tecnologías permiten integrar nuestras formas humanas con el nuevo espacio mediático? ¿Cómo enfrentar el efecto de la automatización sobre el trabajo? ¿Cómo interceptar el peligro la radical reducción de experiencia en “micronarrativas” y en la fragmentación radical del sentido? Con ello se abren preguntas más generales por la relación entre lo humano y la técnica. ¿Es posible suprimir la tecnología? Ni prácticamente, ni ya en términos antropológicos o filosóficos: nada de eso parece posible. Es irreversible. La técnica y, con ello, la razón aparecen como condiciones inevitables y no tiene sentido proponerse como ideal para el futuro una suerte de “retorno a la naturaleza”. Hay, entonces, una responsabilidad que podemos y debemos asumir en relación con el futuro, no sólo como individuos sino en relación con la humanidad y con todo el plexo de los seres vivientes. El ser humano tiene el dudoso privilegio de poder pensar e imaginar otras formas de vivir y actuar. Dudoso privilegio pues no es evidente que la razón sea una ventaja para los seres humanos o implique una superioridad: nos obliga a aprender mucho más. O es un signo de falta de instintos, de una relativa incapacidad comparado con las asombrosas capacidades naturales de otros seres vivos. Pero en verdad las diferencias entre los seres vivos serían algo secundario y lo importante desde un punto de vista ético es lo común: nuestro rechazo a experimentar dolor y sufrimiento innecesarios. Pablo Solari

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