Huella y presencia [tomo I]
Dr. J A IME PÉREZ OLEA experimental de Claude Bernard y a las localizaciones cerebrales de Broca; a lamicrobiología de Pasteur ya la antisepsia de Lister. Este soplo vivificante llegaba a nuestra tierra y encontraba su natural hábitat en la Universidad. Barros, Puelma y Borgoño demostrarían el inmenso valor de la asepsia y antisepsia en la prevención de la infección por heridas de guerra durante la campaña del Pacífico. En este período nace la Sociedad Médica de Santiago (1869), la Revista Médica de Chile (1872), el hospital del Salvador (1872) y e l hospital San Vicente de Paul (1874). Se establece el Profesorado Extraordinario (1881 ), se inaugura el edificio de la Escuela de Medicina (1889) y se inicia el Internado Médico (1893). La medicina nacional tiene un perfil que la individualiza nítidamente desde épocas tempranas. Es el de su Medicina Social. Chile tuvo el primer código sanitario de América (1918). La Ley de Seguro Obrero, propuesta por el senador Exequiel Conzález Cortés, inició la seguridad social y creó un servicio médico de extensión nacional que fue pionera en el continente (1924). El Servicio Nacional de Salud, que refundiera las grandes institu- ciones médicas de la época, fue creado por el senador Salvador Allende en 1952; contaba en esa época con 35.000 camas de hospital y prestaba atención integral al 80% de la población. La Escuela de Salubridad, fun- dada en 1943, se constituyó en el centro formador de un grueso contingente de especialistas en Salud Pública de Chile y los países vecinos. Su liderazgo a través del tiempo es indiscutido. Al promediar el siglo actual , las autoridades de la Facultad encabezadas por los decanos Alejandro Carretón, Hernán Alessandri y Amador Negh- me, acometieron un ambicioso plan de reforma de la enseñanza médica. Los efectos más perceptibles de la nueva orientación fueron la enseñanza teórica-práctica del alumnado en las salas de hospital, la provisión de cargos académicos de dedicación exclusiva o jornada completa, la creación del Departamento de Educación Médica, la expansión de la Biblioteca Central de Medicina y la organización de los Servicios de Bienestar Estudiantil y Asistencia Médica. En la sesión histórica celebrada en el Anfiteatro Lucas Sierra del hos- pital del Salvador el 13 de julio de 1968, el ex decano Alejandro Carretón Silva expresaba: "No me referiré a la reforma que en la Universidad se proyecta realizar... Es el fin de la vida de esta Facultad de Medicina." "Esta Corporación ha tenido como norma marchar a la vanguardia del progreso médico y universitario. Nada ha escapado a su in- quietud y ha sido maestra en lo científico y lo social, en la inves- tigación y en la docencia, en lo técnico y en lo moral. Su trabajo ha sido constantemente difícil y laborioso; frente a la permanente pobreza de medios, ha opuesto su entusiasmo, su método, su or- ganización y su ingenio." 93
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