Huella y presencia [tomo I]

HUELLA Y PRESENCIA había decidido especializarse en Ginecología. En su Consultorio particul, de la Alameda de las Delicias, atendió a sus pacientes hasta avanzada eda< Su carrera funcionaria la inició en 1889, cuando en el mes de abr fue designada médico y profesora de Higiene de la llamada Escuela Norm; de Preceptoras del Sur, ubicada en Santiago. Treinta y ocho años después, con ocasión de conmemorarse el ci, cuentenario de la dictación del Decreto Amunátegui, sus ex alumnas d la Escuela Normal la homenajearon. En esa oportunidad, ella recordó ese primeros años de profesión. Le expresó a sus ex alumnas: "Yo iba tres veces a la semana a haceros la clase ✓de Higiene y visitar a las alumnas enfermas, y después de saludar a la inolvidabl señorita Behring, directora del establecimiento, llegaba al corredc que circundaba el vasto y hermoso jardín del primer 'patio de 1 escuela, y como estabais en recreo, todas vosotras, apenas me d visabais, corríais hacia mi y me saludabais con cariño y sinceridac Pasábamos a la clase y, con entusiasmo, os enseñaba en ella todc los conocimientos de la ciencia higiénica, puesto que vosotras, ft turas maestras, ibais a ser las encargadas de la educación del pu1 blo. Terminada la clase, me acompañabais hasta la enfermerí, ahí examinaba a las alumnas enfermas y daba las indicaciom médicas". Más tarde, en medio de los conflictos previos a la revolución del 91 , Eloís Díaz fue designada Médico del hospital San Borja, el 5 de enero de es año, el mismo establecimiento hospitalario que le había proporcionado < material para su memoria de prueba. Su primer nombramiento, en la Escuela Normal, la puso en contact directo con la educación; el segundo, en el hospital San Borja, con 1 realidad de la salud en los niveles más desposeídos de la sociedad. El cruc de estas dos vertientes orientó su vida profesional, dedicándola, especia mente, al.a mujer y a los niños. De preferencia a los niños más desvalidoi una gran parte de los cuales asistían a la escuela primaria pública y cuya condiciones de vida, tanto en la escuela como en el hogar, eran mu deficitarias. LA I t\SPECTORA MÉDICO ESCOLAR DE SANTIAGO En la segunda mitad del siglo x1x, en los círculos más progresistas de 1 sociedad chilena, aparece la preocupación por los problemas sociales y 1 denuncia de las carencias en la educación, salud, vivienda, entre otros. L acción profesional y social de Eloísa Díaz se inserta en ese contexto. El 14 de octubre de 1898 (Decreto 2011), la Dra. Díaz fue designad Inspectora Médico Escolar para atender las escuelas públicas de Santiagc cargo que había sido creado cuatro años antes. 82