Huella y presencia [tomo I]

HUELLA Y PRESENCIA escasos son aquellos que además de su saber clínico y de su cultura gene, tienen la capacidad de reflexionar certeramente acerca de la condición e la medicina de su tiempo y de los problemas que en ese momento afront; los médicos y están en condiciones de dar directivas orientadoras. En es grupo están médicos de la talla del Dr. William Osler (canadiense) aut, de un texto de Medicina Interna que alcanzó 16 ediciones y de numeras artículos en los que analiza a los médicos y a la medicina de comienzos < este siglo, está también el Dr. Gregario Marañón, profesor de clínica m dica, literato y pensador médico - basta recordar su libro "Vocación Ética"- gloria de la Medicina Española, y entre nosotros está el Dr. G rretón; el libro lo escribió mientras ejercía su Cátedra de Medicina, ap cando la experiencia aprendida en ésta. Tuvo muchos otros intereses, el país aprovechó de ellos. Fue Ministro de Educación, creó el Institu de Chile y participó en iniciativas de bien público; pero fue en su Cáted de la Facultad de Medicina en donde se expresó mejor. Sus ayudant fuimos afortunados al tenerlo como nuestrojefe, pues fue siempre amab y tolerante, de trato fino y elegante, erudito sin pedantería, magnánirr sin debilidad, poseía un carácter firme que le permitió imponer sus punt, de vista con autoridad. Lo más importante, supo imprimir en nosotros: devoción por la Universidad. Estos son mis recuerdos de los 25 años que trabajé en la Cátedra e Medicina del profesor Carretón. Nada de lo que he relatado podía J imaginar cuando traspuse la puerta del hospital San Borja esa mañana e agosto de 1942. Evanston, Illinois, 17 de mayo de 1956 Vengo llegando de Battle Creek en donde he sostenido una prolongac entrevista con toda la plana mayor de la Kellogg Foundation. Tengo impresión que hemos dado un paso muy importante. El documento qt Ud. vio ha causado una magnífica impresión. Se hicieron copias especial, y fue estudiado con todo detalle. Se hará un programa de 3 ó 4 años qt incluye becas y equipo. He escrito hoy mismo una extensa carta a Negl me**. Todo mi esfuerzo en torno de esta gestión frente a la Fundacié Kellogg parece que tendrá resultado, no tanto como esperábamos, pe1 en buena proporción. Sueño con la idea que el hospital tendrá un ali rango. *Carta dirigida por el Dr. Garretón al autor de este artículo. **Entonces Secretario de la Facultad de Medicina. 70